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Convenio 190 de la OIT: ¿Qué es y qué dice sobre la violencia y el acoso en el trabajo?

El Convenio 190 habla sobre la prevención de violencia en centros de trabajo y otros lugares relacionados con el empleo.

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) establece reglas que hablan sobre la violencia y el acoso en los lugares de trabajo, como parte del convenio 190.

En este caso no solo habla de los centros laborales sino también de trayectos, fiestas, viajes y otras formas de comunicación que estén relacionadas con el empleo.

Los lugares que considera el Convenio 190 son:

  • El lugar de trabajo, en los espacios públicos y privados.
  • En los lugares donde se paga al trabajador, donde toma su descanso o donde come.
  • En los trayectos, viajes, eventos o actividades sociales relacionadas con el empleo.
  • Durante las comunicaciones relacionadas con el trabajo: mensajes y correos.
  • En el alojamiento que se le haya proporcionado al trabajador.

¿Cuáles son las medidas que considera el Convenio 190 sobre violencia laboral?

México forma parte del Convenio 190 para proteger a los trabajadores por lo que se reconoce “el derecho de toda persona a un mundo del trabajo libre de violencia y acoso, incluidos la violencia y el acoso por razón de género”.

Dicha violencia es considerada una amenaza para la igualdad de oportunidades por lo que el objetivo del Convenio 190 es fomentar el respeto mutuo y prevenir tanto casos de violencia como de acoso.

La violencia o acoso en el trabajo se define como “un conjunto de comportamientos y prácticas inaceptables, ya sea que se manifiesten una sola vez o de manera repetida, que tengan por objeto, que causen o sean susceptibles de causar un daño físico, psicológico, sexual o económico”.


Al formar parte de este acuerdo, México tiene la responsabilidad de promover en el país entornos de tolerancia y facilitar la prevención de estas prácticas, además de combatirlas.

La OIT considera que la violencia laboral afecta a la salud psicológica, física y, en ocasiones, la sexual de los empleados.

En cuestión de género, la violencia y el acoso impiden que las mujeres accedan al mercado laboral, permanezcan en él o crezcan de forma profesional.

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