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La Comisión Federal de Electricidad (CFE) aseguró que está preparada para mantener el suministro de energía eléctrica en México pese a los aumentos en los precios de los energéticos derivado del conflicto entre Rusia y Ucrania.
La empresa productiva del Estado señaló en un comunicado que existe un protocolo de emergencia ante contingencias. En este se determinan acciones para poder mitigar los efectos en el suministro de gas, y de esta forma evitar el impacto en el servicio eléctrico para proteger la seguridad eléctrica de los mexicanos.
De acuerdo con CFE, este protocolo pide a sus centrales generadoras de electricidad “gestionar de manera óptima su inventario para contar con una autonomía mínima de 10 días, en caso de presentarse un estado de emergencia”.
“Como lo confirmó el presidente de México, nuestro país está preparado para enfrentar posibles aumentos en los precios del gas, ya que cuenta con otras fuentes de energía para generar electricidad”, mencionó la empresa en su comunicado.
¿Cómo funciona el protocolo de emergencia de CFE?
La comisión asegura que cuenta con 12 centrales de generación eléctrica que pueden cambiar de un combustible a otro y que representan 8 mil 81 megavatios (MV), suficientes para enfrentar cualquier crisis energética.
De acuerdo con CFE, las 12 centrales pueden hacer el cambio a distintos combustibles:
- Una puede cambiar de gas natural a diésel.
- Otra puede hacer el cambio de carbón a combustóleo.
- Las 10 centrales restantes pueden cambiar de gas a combustóleo.
Suben los precios de la electricidad en el mundo por el conflicto entre Rusia y Ucrania
La CFE asegura que los precios del gas se han incrementado en Europa de manera considerable. También señala que existe una especulación acerca de los precios de este servicio en México.
Aunque la empresa productiva del Estado asegure que es posible proteger los costos del servicio eléctrico en México, es un hecho que diferentes países del mundo enfrentan incertidumbres respecto al precio de la electricidad, derivado del rompimiento de convenios con el país dirigido por Vladimir Putin para el suministro de gas en sus países.