Cerca de 252 kilos de cocaína incautados por la policía paraguaya fueron sustraídos de un depósito de la jefatura de policía en una provincia al noreste de la capital, indicaron las autoridades el sábado.
A través de la red social Facebook, la policía informó del nombramiento de cinco nuevos jefes de Amambay, un departamento a 460 kilómetros de Asunción. Ellos sustituirían a los siete cesados de las corporaciones policiales locales.
El ministro del interior paraguayo Francisco de Vargas reveló el sábado a medios locales el suceso, asegurando que se trataba de un hecho "gravísimo" y que constituía a todas luces "un robo con evidente complicidad de autoridades policiales de la zona", en declaraciones a la emisora 780am.
"Es claro que hay complicidad de la policía y no estamos hablando de rangos inferiores, esto no se hace sin autorización de jefes", declaró el ministro.
La Comandancia de la Policía Nacional inició posteriormente el procedimiento judicial a siete jefes y subjefes locales por este suceso y detuvo a unos 17 agentes en total, entre ellos todos los que se encontraban de turno cuando ocurrieron los hechos, reportaron varios medios locales.
The Associated Press trató de contactar a la policía paraguaya en varias ocasiones, pero no ha obtenido respuesta.
Posteriormente la página de Facebook de la policía nacional informó del nombramiento de cinco nuevos comisarios o subcomisarios en la zona.
La droga fue sustraída de los depósitos donde se encontraba por indicación de la fiscalía, sin que la puerta hubiera sido forzada. La fiscalía investigaba la vinculación de dos concejales de la zona con este cargamento.
La cocaína había sido incautada en una operación de la policía paraguaya el pasado 10 de enero en una localidad de Amambay, departamento cercano a la frontera con Brasil.