Creo que el balance de los resultados electorales del pasado 6 de junio fue positivo para nuestra democracia.

Votamos casi el 53 por ciento de la lista nominal (aunque es un porcentaje bajo si queremos seguir consolidando nuestra democracia) y los resultados para la LXV legislatura podrían representar un contrapeso para partido en el poder.

Aunque con resultados mixtos de partido a partido habrá un mayor balance en las coaliciones, y aunque Morena y sus aliados no tienen mayoría calificada, esto es 334 de 500 curules, si tendrán mayoría absoluta pues, según los resultados que el mismo INE dio a conocer el día de las elecciones por la noche, se le daban a la coalición de Morena, PT y Verde entre 265 y 292 curules.

Es decir, esta coalición de Morena, PT y Verde podrían tener un máximo del 58.4 por ciento la Cámara de Diputados, el PAN por sí solo tendría un máximo del 23.4 por ciento y el PRI por si sólo del 15 por ciento, Movimiento Ciudadano un máximo del 5.4 por ciento, y el PRD se quedaría con un 4.2 por ciento (cifras aproximadas).

Esto implica que las negociaciones para avanzar con la agenda de la 4T serán constantemente difíciles, al menos que 42 diputados de algunos de los partidos de oposición decidan apoyar a Morena en sus propuestas.

Por otro lado, si bien la composición de la Cámara de Diputados es sumamente importante para lograr pesos y contrapesos a las propuestas del ejecutivo, igualmente es de suma importancia la composición del poder en los estados rumbo al 2024.

Previo a estas últimas elecciones, Morena gobernaba siete estados que en población representan casi el 30 por ciento, esto es 37.5 millones de mexicanos de acuerdo con datos del 2020 del INEGI.

Después de estas elecciones, Morena gobernará un poco más del 46 por ciento, esto es casi 58.5 millones de mexicanos en 17 estados del país, esto es un incremento de 21 millones de personas; el PRI estará en cuatro estados con el 21.7 por ciento de la población, el PAN en ocho estados con el 18.4 por ciento de la población, MC en dos estados con el 11.2 por ciento de la población y el Verde todo parece que tendría el 2.2 por ciento.

Para fines electorales rumbo al 2024 Morena podría tener más probabilidades de ganar las elecciones ahora pues tiene la posibilidad de influir en al menos el 46 por ciento de la población de manera directa desde el liderazgo en 17 estados del país.

Otro dato interesante usando información del INEGI sobre el PIB de México a pesos corrientes del 2019, es que podemos estimar que los estados con gobiernos morenistas, después del 06 de julio, representarán el 48 por ciento del PIB nacional, los del PAN representarán el 18.8 por ciento, los del PRI el 15.7, los dos de MC el 15.2 y del Verde el 2.2 por ciento, es decir la oposición tendrá el 51 de la población y el 49.7 por ciento del PIB nacional, si estábamos buscando tener un balance después de las elecciones, creo que el ejercicio nos salió bastante bien (para bien o para mal).

Ahora bien, rumbo a la carrera presidencial del 2024, después de estos resultados creo que no hay mucha ciencia en pensar que la mejor manera de que la oposición tenga mejores probabilidades de ganar la elección presidencial será uniéndose como lo hizo ahora. Sin embargo, la estrategia de Morena sin duda será la vieja estrategia de “divide y vencerás”; si logra evitar que el PAN y el PRI se junten, será su victoria.

Por otro lado, no debemos de perder de vista a MC que solos ahora gobiernan al 11.2 por ciento de la población y cuentan con el 15.2 por ciento del PIB nacional, creo que podrá ser el “fiel de la balanza” en las próximas elecciones.

Particularmente interesante será ver cómo reaccionará la población que busca superarse, que busca educarse y que busca un mejor nivel vida sin tener que depender del gobierno, esos a los que el presidente llamó “clase media con una actitud aspiracionista” que por cierto son los que pagamos los impuestos que sirven para pagar sueldos de servidores públicos y fondear programas sociales e incluso proyectos absurdos como algunos de los proyectos insignia de la 4T.

Creo que el presidente no toma en cuenta que esa clase media con espíritu de superación no está solo en los estados en donde gobernará la oposición, afortunadamente están en todo lo largo y ancho del país, y afortunadamente somos la mayoría.

Yo no tengo duda que lo que mueve a una nación es precisamente su gente con espíritu de superarse, sea de cualquier clase socio – económica que sea.

El autor es Decano Asociado de Educación Continua de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno, del Tec de Monterrey.