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AHMSA garantiza pago a proveedores, pese a enfrentar Concurso Mercantil y proceso de quiebra

Este jueves un Tribunal de Monclova decidirá si el juicio en contra de AHMSA se mantendrá por el proceso de la Ley de Quiebras de 1999 o cambiará a la Ley de Concurso Mercantil

Ante las dudas que se han generado entre los acreedores que demandan su pago a Altos Hornos de México (AHMSA), que ahora se enfrenta a un procedimiento por la Ley de Quiebras y a otro por la Ley de Concurso Mercantil, la siderúrgica afirmó que el pago a todos sus proveedores está asegurado en tanto se resuelva el juicio.

“Tanto la Ley de Quiebras, como la Ley de Concurso Mercantil, aseguran el pago de los proveedores”, refirió AHMSA a petición de El Financiero.

La situación de AHMSA se complicó hace unos días, luego de que el pasado 9 de agosto un Juzgado Especializado en la Ciudad de México aceptó iniciar un juicio por la Ley de Concurso Mercantil, esto a pesar de que la empresa, ahora comandada por Eugene Irving Davis, tenía ya un procedimiento previo amparado en la Ley de Quiebras.

Aunque este jueves se espera que el magistrado del Tercer Tribunal Distrital de Monclova, Hiredier Huerta Medrano, discrimine si el juicio en contra de AHMSA se mantendrá por el proceso de la Ley de Quiebras de 1999 o cambiará a la figura de la Ley de Concurso Mercantil, las dudas aún persisten entre los acreedores, quienes ya demandan su pago a la acerera ubicada en Coahuila.

“El pago para los proveedores dependerá de la fecha en que iniciaron el juicio de reconocimiento de deuda y bajo el amparo de qué ley quedaron. En ambos casos, su derecho está protegido”, sostuvo Altos Hornos de México.

Se suma incertidumbre por bloque a Planta 1

A la incertidumbre por los dos procesos mercantiles a los que se enfrenta la siderúrgica, se suma el bloqueo a los accesos de la Planta 1 por parte de trabajadores afiliados al Sindicato Minero.


Desde el pasado lunes 24 de julio, un grupo de trabajadores de la acerera bloquearon los accesos de la Planta 1 en protesta por el impago de salarios, lo que ha impedido a los directivos de la empresa proveer de gas licuado a la Coquizadora.

Sin el suministro de gas, la planta ha comenzado su proceso de enfriamiento, implicando un daño estructural irreversible que compromete el plan de reestructura financiera de Argentem, el fondo estadounidense que en abril pasado asumió las riendas de una siderúrgica con más de 650 millones de dólares en deudas.

El bloqueo por parte de los trabajadores y mineros supone un paso más rumbo a la quiebra de la acerera, toda vez que la reparación y puesta en marcha del equipo tras el enfriamiento de la planta supone un costo de 350 millones de dólares y más de un año de trabajos de restauración.

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