La producción industrial en México avanzó 6.9 por ciento a tasa mensual durante julio, informó este viernes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El instituto detalló que el Indicador Mensual de la Actividad Industrial (IMAI), se ubicó en los 90.59 puntos, todavía por debajo de los niveles registrados antes de la pandemia, cuando se situó en 98.20 unidades en marzo. Además, suma dos meses consecutivos en terreno positivo.
De acuerdo con el comunicado, el incremento del IMAI fue resultado de la fuerte alza en las manufacturas y generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, agua y gas.
Las industrias manufactureras avanzaron 11 por ciento en julio, su segundo mayor incremento registrado desde que hay datos, es decir desde 1993. La mayor alza fue en junio cuando escaló 26.81 por ciento.
Solo una de las 22 industrias manufactureras reportaron 'números rojos', entre las que destacó el incremento de 40.66 por ciento mensual del curtido y acabado de cuero y piel.
Las industrias de la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas presentaron un incremento de 5.5 por ciento a tasa mensual, su alza más marcada desde enero del 2018.
La industria de la construcción presentó un ligero avance de 0.9 por ciento a tasa en el séptimo mes del año, su tercer mes consecutivo en presentar avances.
Dos de los tres desagregados que integran a esta actividad se ubicaron en terreno positivo. En primer lugar, los trabajos especializados subieron 1.1 por ciento, la edificación, pilar principal del sector, 0.8 por ciento a tasa mensual, su tercer mes consecutivo con ganancias.
Mientras que la construcción de obras de ingeniería bajó 0.3 por ciento.
De acuerdo con el reporte del Inegi, la industria de la minería presentó un avance de 0.8 por ciento a tasa mensual, su segundo mes consecutivo con incrementos.
De manera anual, el indicador presentó una caída real de 11.6 por ciento en julio, con base en cifras desestacionalizadas.
Por sectores de actividad económica, la construcción disminuyó 23.7 por ciento, las industrias manufactureras 9.5 por ciento, la generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas por ductos al consumidor final 8.8 por ciento y la minería 3 por ciento.