Los precios al consumidor en Estados Unidos tuvieron su primera alza en cuatro meses en febrero, pero el ritmo del incremento fue modesto, resultando en su menor subida anual en casi dos años y medio.
El Departamento del Trabajo informó este martes que su Índice de Precios al Consumidor (IPC) subió 0.2 por ciento, impulsado por aumentos en los costos de alimentos, gasolina y arriendos.
El IPC se había mantenido sin cambios por tres meses consecutivos.
Economistas consultados por Reuters habían previsto que el indicador subiera 0.2 por ciento.
En los 12 meses hasta febrero, el indicador subió 1.5 por ciento, el menor incremento desde septiembre de 2016. En el año a enero se registró un alza del 1,6 por ciento.