La dependencia de combustibles fósiles por parte de las economías emergentes como México, hará que su demanda aumente 130 por ciento de aquí al 2040, lo que representa un obstáculo para las metas del Acuerdo de París sobre el Cambio Climático.
Según The Boston Consulting Group, estos países tendrían que invertir casi el 1.5 por ciento de su Producto Interno Bruto (PIB) en tecnología y modernización de sus industrias, para lograr los objetivos acordados en la conferencia de las Naciones Unidas.
En su reporte "Preparándose para un Mundo Más Caliente", la firma estima que entre el 2015 y el 2040 las economías emergentes incrementarán más de 130 por ciento su demanda de combustibles fósiles, equivalentes a 7 mil millones de toneladas de dióxido de carbono por año, mientras que los países de la OCDE y China reducirán su demanda.
En los países emergentes de Sudamérica y Asia, la deforestación y la producción de metano por la digestión entérica del ganado es un importante contribuyente de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, 15 por ciento, provenientes de la silvicultura y la agricultura.
La firma reconoció que la actividad económica de las naciones emergentes sigue siendo intensiva en energía debido al envejecimiento de las fábricas y las operaciones de fabricación tradicionales, el transporte y la agricultura con procesos sin modernizar. Además, la mayor parte del crecimiento de la población mundial se producirá en estas economías emergentes.
Entre 19 mil y 21 mil millones de dólares se necesitarían invertir hasta el 2030 para desplegar tecnologías de eficiencia energética, destacó el informe.