La Comisión Federal de Competencia (Cofece) emitió a la Comisión Reguladora de energía (CRE) su opinión acerca de los contratos de suministro propuestos por Pemex -antes contratos de primera mano-, con recomendaciones en materia de competencia.
Entre sus observaciones, la Cofece recomendó que Pemex esté obligado a desagregar los distintos servicios que ofrece y los precios de estos, para que el cliente pueda contratarlos por separado. Esto busca que los usuarios puedan pactar el suministro de gasolina sin contratar almacenamiento, transporte o custodia, una situación a la que la comisión ya había prestado atención anteriormente.
También solicitó que, independientemente de la vigencia pactada, exista una cláusula que permita dar por terminado el suministro de forma unilateral, además de que la compra de combustibles a Pemex no genere exclusividad y no limite las operaciones de compraventa con otros proveedores. Pemex deberá también evitar diferenciar entre franquiciatarios y contratantes del suministro, para evitar cualquier desventaja injusta contra estos últimos.
Con respecto al modelo de franquicia, la Cofece sugiere no establecer relaciones a largo plazo ni dificultar la salida de la relación comercial, puesto que el contrato modelo señala una vigencia de 15 años. Pemex deberá aclarar también que el franquiciatario no está obligado a contratar otros servicios además del suministro y que los permisionarios tienen permitido establecer sus propios precios en virtud del nuevo régimen.
Actualmente, Pemex es el único proveedor de gasolinas y diésel en el territorio nacional y tiene firmados 11 mil contratos con estaciones de servicio, la mayoría de los cuales fueron celebrados previo a la entrada en vigor de la reforma energética que establece un esquema de transición hacia un mercado competido.
La reforma establece que a partir del primero de enero de este año los permisionarios podrán adoptar modelos de negocio diferentes al de la franquicia Pemex, que la CRE podrá entregar permisos para expendio a cualquier interesado y que la vigencia de los contratos de suministro no podrán exceder del 31 de diciembre de este año, fecha en la que el mercado del diésel y la gasolina será abierto a la importación.
Las observaciones emitidas por Cofece deberán adoptarse en los contratos vigentes y nuevos con el objetivo de fomentar la competencia en todos los pasos del mercado de la gasolina, lo que permitirá generar mejores condiciones para los consumidores y preparar el terreno previo a la liberación definitiva de precios, el primero de enero de 2018.
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