La producción nacional de gasolinas en noviembre pasado fue 30 por ciento menor que en el mismo mes de 2011, lo que indica que cada año el país ha disminuido en cinco por ciento la refinación del combustible automotriz.
Esto es igual a la pérdida de 436 mil barriles o 70 millones de litros diarios, pues de producir mil 395 barriles diarios, ahora se elaboran 959 mil, de acuerdo con cifras de Pemex.
Lo que se ha dejado de producir es equivalente a dejar de vender gasolina por 15 días en todo el país.
Entre las refinerías que más han dejado de producir el combustible para el país se encuentra Cadereyta, en Nuevo León, que entre noviembre de 2011 y el mismo mes del año pasado tuvo una pérdida del 76 por ciento de su producción, de acuerdo con datos de la propia petrolera. Así, de producir 80 mil barriles diario de Magna y Premium pasó a sólo 18 mil barriles diarios.
Tula, en el centro del país, y que abastece a las terminales de almacenamiento y reparto del Valle de México, es la segunda con mayor caída en la producción, pues perdió 54 por ciento de su elaboración en aquel periodo.
Esta refinería de Hidalgo produjo casi 100 mil barriles diarios en noviembre de 2011, pero ahora está más cerca de los 45 mil barriles diarios.
Madero, por su parte, en volumen perdió también casi la mitad de su producción de gasolinas con sólo 20 mil barriles diarios.
Minatitlán en Veracruz es la planta que más constancia ha tenido en los últimos años con una pérdida de solo cuatro por ciento en su producción.
Para este año el presupuesto para mantenimiento de las refinerías será 12 por ciento menor al año pasado, de acuerdo con la propia Pemex.