Bank of America reportó un incremento mayor de lo esperado en su ganancia trimestral, debido a un aumento de las intermediaciones de bonos y a que el prestamista ganó más por asesoramientos sobre emisiones de deuda, acciones y por acuerdos.
Los bancos de Wall Street se han visto impulsados por el aumento de la actividad del mercado gracias al denominado 'efecto Trump'. Los inversores también cambiaron sus posiciones en torno al referendo que selló la salida de Reino Unido de la Unión Europea y a las subidas de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal, lo que mejoró los ingresos por intermediaciones de los grandes bancos estadounidenses.
Los clientes también pidieron más préstamos a medida que la economía se expandía, aunque el ritmo de crecimiento de los créditos ha decaído un poco recientemente.
"Vimos una buena actividad de clientes en nuestra equilibrada cartera de negocios... La economía de Estados Unidos continúa mostrando optimismo entre consumidores y de los negocios, y nuestros resultados reflejan eso", dijo en un comunicado el presidente ejecutivo de BofA, Brian Moynihan.
Los ingresos totales del segundo banco más grande de Estados Unidos subieron alrededor de 7.0 por ciento a 22 mil 450 millones de dólares en los tres meses finalizados el 31 de marzo, superando la estimación promedio de los analistas de 21 mil 610 millones de dólares.
Los ingresos de BofA de las actividades de intermediación, excluyendo ítems especiales, subieron 21.2 por ciento, a cuatro mil millones de dólares, ayudados por un aumento de 29 por ciento en los ingresos por operaciones de renta fija.
JPMorgan Chase & Co y Citigroup Inc. también reportaron la semana pasada una ganancia trimestral mejor que la esperada, impulsada por una fuerte actividad de intermediación.
Las utilidades netas de la empresa subieron 44 por ciento a cuatro mil 350 millones de dólares, equivalentes a una ganancia por acción de 41 centavos, superior a las estimaciones de analistas de 35 centavos por título.