¿Quién es Mariano Rivera, la leyenda en la reinauguración del estadio de Olmecas de Tabasco?

El estadio de beisbol Centenario 27 de Febrero de Tabasco fue reinaugurado este fin de semana en un evento encabezado por el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, y que contó también con la presencia del exbeisbolista panameño Mariano Rivera.

López Hernández acudió en representación del presidente Andrés Manuel López Obrador para la reapertura del estadio de los Olmecas de Tabasco de la Liga Mexicana de Beisbol, cuya remodelación tuvo una inversión de 276 millones de pesos.

‘The Sandman’ fue el encargado del lanzamiento de la primera bola en la reinauguración del estadio Centenario de Tabasco y el secretario de Gobernación estuvo al bat. En una primera oportunidad, el político bateó de foul, pero en un segundo intento conectó un imparable que casi golpea al panameño y a una reportera.

¿Quién es Mariano Rivera?

Mariano Rivera es un exbeisbolista panameño-estadounidense nacido en la Ciudad de Panamá (29 noviembre 1969) que jugó durante toda su carrera profesional como pitcher con los New York Yankees de las Grandes Ligas.

Es considerado uno de los mejores relevistas de la historia de la Major League Baseball (MLB). Ganó cinco Series Mundiales y fue 13 veces All Star. En 2019 se convirtió en el primer jugador en ingresar al Salón de la Fama con una votación unánime del 100 por ciento.

‘The Sandman’ -apodo adquirido en Grandes Ligas porque entraba a la loma con la canción ‘Enter Sandman’ de Metallica- en su juventud estudiaba y trabajaba pescando sardinas en un barco que capitaneaba su padre. Le gustaba jugar futbol y beisbol en sus tiempos libres.

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A los 18 años se unió a un equipo amateur llamado Vaqueros; el cazatalentos Herb Raybourn lo vio jugar como campocorto, pero consideró que no tenía suficiente potencial para la MLB.

Un día, Mo reemplazó al pitcher titular a pesar de no tener experiencia y lo hizo muy bien. Dos de sus compañeros contactaron a otro visor de los Yankees para una invitación a un campamento del equipo neoyorquino en Panamá.

Raybourn lo volvió a ver jugar, ahora como pitcher, y quedó impresionado, por lo que le consiguió un contrato como agente libre con los Yankees en 1990 y así inició la exitosa carrera de Mariano Rivera en las Grandes Ligas.

El exbeisbolista panameño es muy devoto de la religión cristiana y está involucrado en causas filatrópicas a través de su Fundación Mariano Rivera.