En El Apocalipsis (todo incluido), de Juan Villoro, el autor retrata a ciudadanos empeñados en ignorar su desgracia, ya sea por sobrevivencia o por deporte, pero también porque esperan que cuando el mundo se resquebraje en mil pedazos, les toque algo mejor.
Con precisión y enorme sentido del humor, Villoro narra cómo un guía de Chichen Itzá da una conferencia sobre la teoría maya del fin del mundo para impresionar a una mujer y, de paso, todo en lo que ha creído. A partir de ahí se desprende una historia que sorprende por la narrativa de primer nivel.
En otro cuento y tras una caminata iniciática por la ciudad, una niña empieza a sospechar que su papá convive con una familia alternativa, y en otro, un hombre que se dedica a la estadística tiene un tórrido romance con una mujer desconocida que miente cuando está excitada. Algo sumamente raro.
De esa forma, el escritor, ensayista y dramaturgo presenta una galería de personajes que delatan su clandestinidad estando en su propio país, que miran hundirse el terruño desde la cómoda nostalgia del exilio, que cruzan una y otra vez sus fronteras sólo para mirar con ojos frescos el derrumbe de siempre.
Los cuentos avanzan con soltura por caminos cuesta arriba: herencias, arrestos que derivan en partidos de futbol, y amigos que funcionan como enemigos. Pero también remontan corrientes traicioneras: la necesidad de reinventarse en medio de cada crisis, y de sobrevivir a las batallas que se pierden por goliza.
Juan Villoro nació en la Ciudad de México en 1956. A este autor se deben las novelas como El disparo de argón, Materia dispuesta, El testigo, Llamadas de Ámsterdam y Arrecife. Igualmente, los ensayos Efectos personales y De eso se trata. Villoro además ha escrito los libros para niños El profesor Zíper y la fabulosa guitarra eléctrica y El libro salvaje.