Salvador Garcia Linan

Corrupción: generadora de trastornos mentales

 

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¿Has pensado que la grave corrupción pública y privada que padecemos en México tiene efectos devastadores en la salud mental de las personas y de la sociedad en su conjunto?

La corrupción se define como un comportamiento deshonesto, antiético, abusivo e ilegal llevado a cabo por políticos y funcionarios públicos para obtener ganancias egoístas.

Los políticos en sus corruptelas (acciones deshonestas fuera de la ley) no han pensado que existen altos costos de salud mental en sus actos corruptos. Existe una relación entre la angustia psicológica y la corrupción en el gobierno.

En México hay condiciones propicias para la corrupción debido a la impunidad en toda la cadena gubernamental que no obtiene ningún castigo. La corrupción tiene efectos perjudiciales no sólo en el desarrollo económico y en los aspectos socioeconómicos, sino también en los problemas de salud mental, los cuales se originan por la impunidad de los atropellos y la complicidad entre los políticos en cualquier nivel. La corrupción aumenta la sensación de inseguridad porque ante la ley no todos somos iguales.

Las formas más comunes de corrupción abarcan desde la malversación de fondos, el robo, el crimen, el fraude, el favoritismo, el nepotismo y el pago de sobornos para evitar problemas con la policía y los jueces.

Un factor injusto de la corrupción es que empeora la desigualdad, la pobreza y la injusticia al no castigar a los corruptos, sabiendo quienes son. Los medios de comunicación y los legisladores son comprados para no denunciar la corrupción. Lo que afecta la salud mental de los ciudadanos es la no rendición de cuentas y el éxito de los funcionarios corruptos a través de décadas de extorsión.

En México el problema es muy grave ya que los corruptos, con una desvergüenza que afecta a los honestos, ocupan altos cargos y hacen sentir al pueblo que ellos son los listos.

La corrupción en el gobierno de México es un sufrimiento inevitable que provoca estrés, ansiedad, desesperación, depresión, angustia, rabia, indignación y tristeza. Un sufrimiento desprovisto de justicia por no haber nadie que la castigue.

Cada acto de corrupción de la autoridad es una humillación para la víctima. La corrupción es una característica central de la vida pública de México.

Twitter:@SalvadorG.Lignan

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