Interesante la entrevista de La Silla Roja en El Financiero con AMLO porque refleja su pensamiento y por tanto arroja luz sobre sus acciones. Dijo que está a favor de la crítica y de la polémica, que incluso la disfruta. Reiteró que nunca guardará silencio y que su deber es responder, ejercer la réplica. Insistió en mantener divididos a los actores políticos y llamar conservadores a quienes no quieren el cambio que él propone. Sean de izquierda o de derecha, aunque se digan liberales, son adversarios.
Dijo que no busca confrontar y que en su gabinete se permiten los desacuerdos. Citó el caso del NAICM en Texcoco, donde se dio un debate, pero que a él lo tienen que convencer con argumentos. Es decir, tiene ideas ya firmes, no lee, no investiga por sí mismo, espera a que se le presenten hechos o elementos. Interesante caso.
Dijo que no busca confrontar, que el debate no significa odio y se fue por esa vertiente moral, más que por el ejercicio de gobierno. E incluso señaló que se controla y autocensura en sus expresiones por la investidura. Que los cambios se impulsan por la vía pacífica, que la violencia verbal no es relevante ni pasa de ese ámbito. Interesante caso.
Considera a los opositores saqueadores y corruptos, pero pueden reinvindicarse aceptando la transformación, el cambio. Por eso el perdón. Sobre el gasto público y los indicadores macroeconómicos dijo que México sigue siendo seguro para invertir, que la BMV se ha mantenido en buen nivel, al igual que nuestra moneda. Que mantener el equilibrio financiero en el presupuesto ha ayudado y se han impulsado nuevos programas sociales, así como de infraestructura como el Tren Maya. Interesante caso.
Sobre la Guardia Civil insistió que el mando debe ser militar por razones de disciplina y control, que no habrán más masacres de las fuerzas armadas porque él tiene el mando supremo. Interesante caso.
Sobre el combate al robo de gasolinas, AMLO insistió en que no había más opción que cerrar ductos, no había otra estrategia afirmó. Pidió a la población su apoyo y resistir. Interesante caso.
AMLO sigue siendo el mismo. No hay engaño. Cree en su proyecto. Piensa concretarlo. No le interesa la oposición. Lo quiere hacer por la vía institucional, sin violencia. Ese es su legado. Por tanto, ya saben quién es nuestro Presidente. Hayas o no votado por él será quien nos represente y gobierne. Así que lo mejor para influir ya lo saben, hay que convencer al Primer Mandatario. Las vías son el gabinete, el legislativo. La prensa fifí influye pero no decide y los dueños de medios pueden acotar críticas. Las redes son espacios que se disputan y tiene su peso, pero no como para formular propuestas.
Así que el cabildeo volverá a ser una práctica importante, acotada, con dificultades, pero una vía para la expresión de la sociedad civil organizada y para los organismos empresariales. Se ha buscado erróneamente limitar la actividad. Creo debería fomentarse para que quienes toman las decisiones cuenten con información amplia de los impactos de las mismas.
Lamentarse o por el contrario, entusiasmarse en relación al gobierno de AMLO que apenas inicia no es el tema. Lo importante es sumarse y aportar lo que cada uno pueda, desde su ámbito de influencia, para evitar tragedias mayores por decisiones erróneas o no bien fundamentadas. Por eso el activismo es muy importante, ante la falta de contrapesos. El desgaste de AMLO en poco más de un mes es insostenible física y políticamente. Se irán serenando ánimos y situaciones. Esto apenas empieza.
Cerrar ductos puede o no ser la mejor opción para trazar la ruta del robo de combustible. Lo veremos en sus resultados. Hoy los costos sociales y económicos a la población se incrementan exponencialmente, ojalá pronto se resuelva el problema de abasto, ya que no hay escasez. Con todo este desabasto hay quien señala que en realidad AMLO mató dos pájaros de un tiro. Por una parte combate ilegal robo, y, por otra, se evitan las quejas por el incremento del costo de las gasolinas autorizado por el Congreso en el IEPS. No hay nada más caro que lo que no puedes comprar. Nadie se queja del aumento.