La Fiesta Está Viva

Sin tregua

En la actualidad, Sergio es uno de los matadores de toros más exitosos de nuestra baraja taurina, escribe Rafael Cué.

Esta no es la primera columna que dedico al matador Sergio Flores, torero cuyo lema #SinTregua se ha convertido en su modus operandi para afrontar su carrera. Sergio se fue de niño a España, en busca de un sueño, dejando atrás en su Apizaco natal, a familia, amigos y vida.

En la actualidad, Sergio es uno de los matadores de toros más exitosos de nuestra baraja taurina, su carrera ha sido bien planeada y ejecutada, pese a los imponderables del toro, las cornadas, la grilla taurina y todo el entorno que nunca ha sido fácil. El de Tlaxcala ha sabido resolver todo lo anterior con argumentos muy sencillos, su capote y su muleta, triunfando prácticamente cada tarde y sobre todo en momentos claves. La cuarta corrida de la Temporada Grande fue una de estas citas claves —que en realidad cuando un torero va en ascenso, ya todas las tardes son claves—.

Seis toros muy bien presentados de Xajay; un deleite visual la estampa de los astados que salieron por la puerta de chiqueros. En su juego hubo de todo, lo que siempre se mantuvo fue el interés que despierta la bravura en sus distintas manifestaciones.

Diego Urdiales, gran torero riojano —ha sido también tema de esta columna en más de una ocasión—, alternó con Octavio García El Payo—torero que por su arte y concepto taurino me ha inspirado a dedicarle este espacio— y Sergio Flores. Cartelazo.

Durante la tarde pudimos experimentar la emoción completa del toreo, el peligro, el arte, la entrega, la cornada, el drama. Diego Urdiales es un torero clásico, elegante, cuya forma de sentir le permite comunicar de inmediato la profundidad de su toreo a publico y aficionados por igual; no tuvo en su lote quizá la colaboración completa de los astados, lo que por otro lado nos permitió gozar de su maestría y capacidad lidiadora, logrando altas cotas artísticas en chispazos de torería y profundidad. Es un privilegio presenciar su actuación en el ruedo.

El Payo ha tenido mala suerte esta temporada; dos tardes, dos percances, el primero apenas el 11 de noviembre, donde recibió tremenda cornada en la pierna derecha, de 25 y 10 cm. Aunque usted no lo crea, reapareció el día 30 en Querétaro y el domingo hizo el paseíllo en Insurgentes. Ante su primer toro, con el capote ya nos regaló su arte: un par de remates de tal belleza, que calaron en el alma. El toro desde su salida se mostró áspero y de corta embestida. El queretano le apostó al toro desde el primer muletazo y éste no le fue agradecido, apenas en el tercer muletazo se frenó y tiró seco derrote al pecho del torero, levantándolo y tumbándolo con impresionante violencia. Drama en la arena, angustia en el tendido. Tras unos minutos en la enfermería, increíblemente salió de nuevo al ruedo para pasaportar al toro que se había resabiado y era una máquina de tirar cornadas. Gesta de hombría, torería y pundonor. Reitero que a estos hombres, a los toreros, hay que admirarles y respetarles, pues son capaces de hacer lo inverosímil. Fue tal el golpe, que ya no pudo salir ante su segundo toro, el quinto de la tarde.

Sergio Flores fue anunciado en dos tardes esta temporada: el domingo y el próximo 12 de diciembre en la Corrida Guadalupana, festejo de máxima expectación taurina, cultural y social; pero antes había (por obligación y convicción) que triunfar el domingo 2, y así lo hizo. Su tauromaquia va en conexión directa con su forma de abrazar la vida, entregarse al toro en cuerpo y alma, y una vez en la plaza, no dejar nada al torear. Se encontró con un buen toro de Xajay, "Ganaderito", cárdeno de pinta, serio, que le permitió hacer su toreo y que le exigió demostrar su lealtad al lema #SinTregua.

La gente vibró. En dos horas y media pasamos por un cúmulo de distintas emociones, nos sentimos vivos, contactamos con nuestra esencia humana de sentir. Tanto el encierro de Xajay, como los tres toreros, fueron los protagonistas.

El próximo domingo viene la quinta corrida en la Plaza México: seis toros de la ganadería zacatecana de Santa Bárbara, para Jerónimo, el hispano Antonio Ferrera y Juan Pablo Sánchez. Cartel de artistas.

Lo invito a asistir a la plaza, vívalo en primera persona, le garantizo que no se va a arrepentir.

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