PUEBLA. El gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, rechazó que exista un problema de ingobernabilidad en la entidad tras el linchamiento y asesinato de dos personas en Ajalpan quienes fueron acusadas por los pobladores de querer secuestrar a una menor.
Pese a que este hecho se suma a otros intentos de linchamiento que se han registrado en Puebla durante los últimos dos meses, el gobernador insistió en que se tiene que analizar cada caso, y que estos hechos revelan la urgencia de contar con un mando único policiaco y evitar este tipo de situaciones violentas.
Tras entregar 28 patrullas y equipamiento a elementos de la Policía estatal, Moreno Valle lamentó el homicidio de las dos personas que perecieron quemadas a manos de una turba en Ajalpan y aseguró que los alcaldes han sido rebasados en el tema de seguridad, lo que ha provocado el descontento de algunas poblaciones que, erróneamente, han decidido hacerse justicia por su propia mano.
AÚN NO CONFIRMAN IDENTIDAD DE LAS VÍCTIMAS
El procurador General de Justicia, Víctor Carrancá Bourguet, indicó que aún no confirman la identidad de las víctimas aunque entre las propias autoridades trasciende la versión de que se trataba de dos encuestadores y no de delincuentes.
"Todavía no tenemos claro; estuvimos en el lugar de los hechos pero no pudimos hacer diligencias en un principio por la misma situación (…) ya se inició la carpeta de investigación, todavía no están identificadas las dos personas, no ha comparecido algún familiar a reconocerlos que eso nos permitirá establecer su procedencia, qué hacían ahí, confirmar si efectivamente eran encuestadores o no", sostuvo.
El funcionario rechazó que se viva un problema de ingobernabilidad en la entidad: "a mí no me correspondería ni siquiera mencionarlo, son lugares en los que habrá que poner atención y habrá que analizar qué fue lo que provocó esto y hacer que algunos miembros de la población reaccionaran de esta manera".
En tanto, Jesús Rodríguez Almeida, secretario de Seguridad Pública, aseguró que aunque hubo presencia policíaca las cosas se salieron de control debido a que se contaba con pocos uniformados estatales en la zona para enfrentar a más de mil pobladores del lugar.
"Se tienen reuniones con los municipios para pedir los presidentes municipales y policías que supervisen al personal, que en caso de sospecha de alguna persona los pongan a disposición del ministerio público y no los lleven a las presidencias porque se generan estas condiciones. Pedimos a los ciudadanos que denuncien y pongan en manos de las autoridades cualquier hecho constitutivo de delito", sentenció.
Añadió que hay una investigación abierta por los hechos y que hay personas identificadas contra quienes se deberá proceder.