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'Emilio' era amigo De García Valseca y hasta pusieron una escuela juntos

La amistad de Raúl Julio Escobar Poblete, Comandante Emilio, con Eduardo García Valseca implicó negocios y acuerdos que derivaron en la fundación, en San Miguel de Allende, de una escuela de educación básica. La cual fundaron. 

SAN MIGUEL DE ALLENDE.- Uno los recuerdos que en San Miguel de Allende, Guanajuato, se tienen de Raúl Julio Escobar Poblete, Comandante Emilio, presunto exterrorista chileno detenido el 30 de mayo en esta ciudad por el secuestro de Nancy, una mujer de origen francoestadounidense, es la amistad que tuvo con Eduardo García Valseca, en cuyo secuestro, ocurrido en 2007, ahora también se le busca vincular.

De acuerdo con testimonios obtenidos por El Financiero, la amistad de Emilio con García Valseca data de varios años e implicó negocios y acuerdos que derivaron en la fundación, en San Miguel de Allende, de una escuela de educación básica.

"No eran simples conocidos, sí había una amistad entre ellos", dijo una de al menos tres personas que confirmaron la amistad entre el Comandante Emilio y el empresario, hijo del coronel del Ejército mexicano José García Valseca.

Explicaron que Eduardo García Valseca era propietario de un amplio terreno en el poblado de Atotonilco, a 12 kilómetros del centro de San Miguel de Allende, por la salida a Dolores Hidalgo.

García Valseca fundó una escuela junto con un compacto grupo de padres de familia, entre quienes estaba Emilio, quien tenía desde hace poco más de una década una doble vida en México bajo el nombre de Ramón Alberto Guerra Valencia.

Los testimonios coinciden en señalar que dicha escuela se instaló en la propiedad de García Valseca. Se trataba de un colegio con un "concepto poco explorado en México", y es que adoptó un sistema pedagógico de origen alemán denominado Waldorf.

Aseguraron que esa escuela fue pensada para los hijos de la comunidad intelectual, nacional y extranjera que vive en San Miguel, entre quienes hay pintores, músicos, poetas, alguno de ellos, incluso, impartían clases en el colegio.

"Una vez que ya estaba en funcionamiento la escuela, ocurrió un hecho inesperado. El 13 de junio de 2007 un grupo armado secuestró a Eduardo García Valseca y su esposa Jayne Rager, luego de dejar a sus hijos en la escuela. A ella la dejan para juntar el dinero del rescate, él permaneció siete meses privado de la libertad. En ese tiempo la escuela siguió funcionando con normalidad", explicó otra persona allegada a este círculo que pidió no revelar su identidad.

Al ser liberado y aún sin conocer los antecedentes guerrilleros de Ramón Alberto Guerra Valencia o Raúl Julio Escobar Poblete, el empresario García Valseca acusó que detrás de su plagio había un grupo internacional armado con conexiones con grupos como el EPR, las FARC e incluso ETA.

Según los testimonios recabados por este diario, una vez que Ramón Alberto Guerra Valencia fue detenido y se supo que su verdadera identidad era Raúl Julio Escobar Poblete, también se conoció que no era el único exguerrillero chileno que había llegado a México a hacer una doble vida.

"Ramón, como aquí todo mundo lo conoce, llegó a México con varias personas, entre ellas Patricia Fernández García, su expareja sentimental, y Esteban Solís, un fotógrafo muy conocido acá en San Miguel de Allende; son los que yo recuerdo", precisó otra persona que accedió a dar su testimonio a cambio de no revelar su identidad.

Según las investigaciones, que aún siguen en curso, Patricia Fernández García es en realidad Marcela Eugenia Mardones Rojas, detenida a principios de junio de este mismo año en Chile; en tanto, Esteban Solís fue el nombre con el que ocultó su verdadera identidad Ricardo Palma Salamanca, El Negro Palma o Comandante Rafael.

Dichas personas, junto con Emilio, son destacados integrantes del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, acusados de diversos actos terroristas en Chile durante la dictadura de Augusto Pinochet, entre ellos el ataque en la Universidad Católica de Chile, el 1 de abril de 1991, en el que murió el senador Jaime Guzmán Errázuriz.

De acuerdo con los testimonios, luego de la liberación de Eduardo García Valseca y su autoexilio a Estados Unidos, los padres de familia se unieron, dejaron la propiedad del empresario, conformaron una asociación civil para crear un nuevo colegio denominado Waldorf Árbol de la Vida, ahora ubicado Charco de la Sierra, en San Miguel.

"Coordinamos una comunidad educativa basada en el método y el plan de estudios propuesto por la Pedagogía Waldorf, que refleja los principios básicos del amor, la belleza y la bondad", dice su publicidad. 

Los padres de familia decidieron que fuera Emilio quien asumiera la presidencia del Consejo de Administración de la asociación civil, cargo que ostentó hasta su detención. El colegio rechazó una solicitud de entrevista.

En tanto, José Luis Vargas, abogado defensor de Escobar Poblete, desestimó la posible vinculación de su cliente en el secuestro de Eduardo García Valseca, pues consideró que "no hay evidencia sólida" que permita hacer un vínculo.

"Hasta ahora son sólo conjeturas que se han hecho en los medios de comunicación, pero en la investigación de la autoridad no hay evidencias sólidas para poder hacer esa afirmación. Todos se cierran a esa idea ya armada en los medios, pero la realidad es otra, hay que exigir a la autoridad a que investigue bien el caso", dijo el litigante.

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