La denominación de origen y la sanidad de los productos serán claves en las negociaciones con miras a modernizar el Tratado de Libre Comercio México-Unión Europea (TLCUEM), dijo a EL FINANCIERO, el comisario de agricultura europeo, Phil Hogan.
"Los puntos clave que seguramente estaremos discutiendo son tarifas arancelarias, denominaciones de origen y temas sanitarios y fitosanitarios", dijo Hogan, quien está de visita en México para preparar el periodo de negociaciones de modernización del tratado.
Si bien Hogan se congratuló del ambiente positivo y la ambición que ambas partes muestran para ampliar el tratado, que actualmente tiene liberalizado poco más del 60 por ciento de los productos agroalimentarios, el funcionario europeo dijo que Bruselas será dura en los temas de sanidad.
"Esperamos poder mostrar flexibilidad en las diversas áreas de las negociaciones, pero seremos fuertes en cuanto a la calidad de los alimentos en ambas partes", dijo.
El comisario de agricultura de la UE recordó que ambas partes ya negocian la equivalencia de las certificaciones de productos orgánicos, un mercado que crece 5.5 por ciento cada año en toda Europa y que tiene gran potencial para los productores mexicanos.
Uno de los puntos que buscan detonar con la eventual equivalencia de productos orgánicos, según Hogan, es poder beneficiar a los pequeños productores.
"Queremos tener más productos mexicanos en Europa y viceversa, esto es donde le damos el valor agregado y el ingreso extra a nuestros granjeros, en particular a los pequeños productores", puntualizó.