MCALLEN.- Al delinear su plan migratorio y fronterizo, Jeb Bush, exgobernador de Florida y precandidato republicano a la Casa Blanca en las elecciones de 2016, buscó marcar contrastes con el empresario Donald Trump, quien encabeza los sondeos, y subrayó que "se necesita una estrategia mucho más profunda que construir una cerca", en alusión a la promesa de su rival de amurallar el límite con México y expulsar a los once millones de indocumentados que viven en Estados Unidos.
Ante los reporteros en esta ciudad vecina de Reynosa, Tamaulipas, Bush también pidió superar las críticas por su empleo de la frase "bebés ancla" para referirse a los niños de inmigrantes que nacen en el país y por tanto son ciudadanos estadounidenses ––lo que Trump y otros aspirantes como Ted Cruz y Bobby Jindal proponen eliminar–– y aseveró que "estaba enfocado en un tipo específico de caso y está más relacionado con asiáticos", aunque consideró que es un "fraude" esa práctica.
Puntualizó que apoya la 14 enmienda constitucional que establece ese derecho y, cuando un periodista le preguntó en español si ofrecería una disculpa a los que se sintieron ofendidos, aseveró que "mis antecedentes, mi vida, el hecho de que he estado inmerso en la experiencia migratoria, es ridículo por eso que la campaña de (Hillary) Clinton y otros sugieran que de alguna forma estoy usando un término peyorativo.Por cierto, creo que necesitamos tomar un respiro y calmarnos un poco en lo que se refiere a la corrección política, en que tienes que ser regañado cada vez que dices algo. Nadie me va a enseñar en esto", manifestó.
El candidato republicano además expresó en español:
Estoy orgullosamente casado con una mexicana estadounidense. Mis hijos son hispanos
En la entidad que gobernó su hermano George Walker antes de ingresar a la Casa Blanca en 2001, Bush, cuyo programa incluye reforzar la vigilancia limítrofe y abrir un camino a la regularización de los migrantes, insistió en que los planes de Trump no están basados en principios conservadores. El hecho es que su propuesta es irreal.
Costaría cientos de miles de millones de dólares, violaría las libertades civiles y crearía una fricción con nuestro tercer socio comercial que no es necesaria
Su equipo de campaña, además, difundió un video que califica de "catástroficas" a las iniciativas del magnate neoyorquino.
Trump no tardó en responder y, en una declaración a los medios, recalcó que Bush "está tan mal en las encuestas que ahora empezó a gastar parte del dinero que sus jefes, los intereses especiales y los cabilderos le han dado para atacarme. Lo último que este país necesita es un presidente de baja energía sin sustancia o ideas para hacer grande a EU otra vez. Hasta el video es aburrido".
Poco antes, elogió su decisión de visitar la frontera y dijo que ahí encontraría que atravesarla de manera ilegal "no es un acto de amor.
Yo estuve ahí. Es un asunto duro, no es amor, sino otras cosas que ocurren", señaló en alusión a declaraciones formuladas por Bush hace un año, cuando en una entrevista de televisión, apuntó que los indoumentados "rompieron la ley, pero no es un delito. Es un acto de amor, es un acto de compromiso con tu familia", al comentar las reunificaciones familiares.