Mundo

Japón y EU discrepan en cumbre del G7

En el marco de la cumbre del G7, EU lanzó una advertencia a Japón en contra de una devaluación competitiva de su moneda y remarcó que es importante que el país asiático se abstenga de una acción de este tipo.

Estados Unidos lanzó el sábado una nueva advertencia a Japón en contra de una devaluación competitiva de su moneda, exponiendo una división sobre la política del tipo de cambio que opacó una cumbre de los líderes de Finanzas del Grupo de los Siete países más ricos (G-7) organizada por la nación asiática.

Japón y Estados Unidos discrepan sobre la política del tipo de cambio, debido a que Washington sostiene que Tokio no tiene una justificación para intervenir en el mercado para frenar las alzas del yen, dado que la cotización de la moneda sigue siendo "ordenada".

En negociaciones bilaterales antes del segundo día de la cumbre del G-7 en Sendai, el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Jack Lew, dijo al ministro de Finanzas de Japón, Taro Aso, que es importante abstenerse de una devaluación competitiva de la moneda.


"El secretario Lew subrayó que los compromisos hechos por el G-20 en Shanghái de usar todas las herramientas de política para promover el crecimiento -la política fiscal, monetaria y reformas estructurales-, abstenerse de una devaluación competitiva y mantener una comunicación estrecha han contribuido a la confianza en la economía global en los últimos meses", dijo Departamento del Tesoro en un comunicado.

"Él destacó la importancia de que los países sigan adhiriéndose a esos compromisos", agregó.

Luego de que años de impresión agresiva de dinero han llevado a la política monetaria a su límite, la respuesta política del G-7 a una inflación débil y un crecimiento mustio se ha vuelto cada vez más fragmentada.

Alemania no mostró señales de responder a los llamados de Japón y Estados Unidos para impulsar el gasto fiscal.

Washington también advirtió a Tokio sobre su dependencia excesiva en la política monetaria y un funcionario de alto rango del Departamento del Tesoro dijo que Japón está aplicando reformas estructurales, "aunque lentamente".

El funcionario agregó que Japón debería garantizar que su política fiscal no dañe a su economía, pidiendo una aplazamiento del alza de impuestos prevista para el próximo año o un mayor estímulo fiscal para compensar el lastre sobre la economía.

Ahora que existen divisiones al interior del grupo sobre en cuánto debería aumentar cada país su gasto, los líderes de Finanzas del G-7 pedirán una combinación de políticas fiscal, monetaria y estructural para impulsar la demanda, pero dejarán que cada miembro decida sus propias prioridades de política.

"Estoy al tanto de que hay países que pueden aplicar estímulo fiscal, mientras otros no pueden debido a su situación", dijo Aso el viernes, sugiriendo que Tokio estaría dando un paso atrás respecto a sus llamados previos a una acción fiscal conjunta del G-7.

También lee: