Cuatro estudiantes de la Universidad de Texas fueron hospitalizados, pero se encuentran conscientes, después de que se registrara una explosión en el estacionamiento de la escuela, donde se habían reunido para probar un sistema de combustible para un cohete experimental.
El dispositivo explotó una vez que se encendió el combustible poco antes de las 10 p.m. del jueves.
Un asesor de la facultad del club de la Organización Noroeste de Ingenieros Aeroespaciales se encontraba con los estudiantes, y no resultó herido, detalló la portavoz de la universidad, Jodi Walker.
Los estudiantes heridos fueron trasladados al Centro Médico Gritman en Moscow, Idaho. El portavoz del nosocomio, Eric Hollenbeck reportó que todos se encuentran en buena condición. Inicialmente, uno de los funcionarios del hospital había informado que una de las víctimas estaba en condición crítica.
La escuela dijo que los estudiantes, cuyos nombres no se han dado a conocer, se encontraban conscientes y en comunicación con las autoridades escolares. El vicepresidente Daniel Ewart dijo que se sometió a procedimientos quirúrgicos a las cuatro víctimas.
La Oficina Federal de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos investiga el incidente, pero no se trata de una indagatoria criminal, de acuerdo con el jefe de la policía de Moscow, James Fry.
"Hasta el momento no hay motivos para creer que se trata de algo más que un accidente", comentó Walker.
Los miembros del club no pretendían lanzar el cohete experimental, reconoció Ewart. En su lugar, utilizaban un dispositivo compuesto por un tubo galvanizado de alrededor de 30 centímetros (un pie) de longitud, y de 27 milímetros (poco más de una pulgada) de diámetro, para poner a prueba el combustible, recalcó.
"No había intención de lanzar un cohete", indicó Ewart.
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