Monterrey

Disminuye productividad en Nuevo León

OPINIÓN. El INEGI informó además que el IPL en los comercios al mayoreo registró un tasa negativa de (-11.8) por ciento, mientras que en los comercios al menudeo se incrementó en 1.6 puntos porcentuales.

La productividad del trabajo en Nuevo León disminuyó durante 2015, de acuerdo con información proporcionada por el INEGI. El Indice de Productividad Laboral (IPL) por hora trabajada en la industria manufacturera de la entidad disminuyó (-2.1) por ciento en el cuarto trimestre de 2015, con este resultado, la productividad en las manufacturas disminuyó en 1.4 puntos porcentuales durante el año pasado.

El INEGI informó además que el IPL en los comercios al mayoreo registró un tasa negativa de (-11.8) por ciento, mientras que en los comercios al menudeo se incrementó en 1.6 puntos porcentuales.

La medición de la productividad laboral permite conocer y evaluar la eficiencia del aporte del factor trabajo al proceso productivo. Los analistas consideran la productividad como un indicador importante en la determinación de la tasa de crecimiento de la economía, la creación de empleos, las remuneraciones al factor trabajo y, en ùltima instancia, los niveles de vida y bienestar de la población.

El IPL está constituido por el índice global de productividad laboral de la economía y sus tres grandes grupos de actividad, así como por los índices de productividad laboral y del costo unitario de la mano de obra de cinco sectores de actividad económica: la construcción, las industrias manufactureras, el comercio al por mayor, el comercio al por menor y la agrupación de los servicios privados no financieros.

A nivel nacional, durante 2015 la productividad laboral con base en horas trabajadas disminuyò (-0.5) por ciento en los establecimientos manufactureros. Se incrementò 1.8 puntos porcentuales en las empresas constructoras.

A su vez, en el comercio al por mayor y al por menor la productividad creció 3.4 y 2.2 puntos porcentuales, respectivamente, mientras que en los servicios privados no financieros se incrementó 5.3 por ciento.
Observando el comportamiento por entidad, se observan diferencias impresionantes el el comportamiento de la productividad de las manufacturas durante 2015. Los incrementos màs importantes se registraron en Chiapas, con un crecimiento de 24.6 porciento, Colima (20.7 por ciento) y Zacatecas, con una tasa de 22.0 puntos porcentuales.

Por otro lado, entidades como Quintana Roo, Tabasco y Tamaulipas registraron caìdas superiores a los ocho puntos porcentuales en este indicador.

Otro indicador elaborado por el INEGI es el Índice del Costo Unitario de la Mano de Obra (ICUMO), este es un indicador complementario al índice de productividad laboral, el cual resulta de relacionar el costo por unidad de insumo laboral (remuneraciones medias reales), con la medida de la productividad laboral.

El ICUMO en las empresas constructoras disminuyó ()1 por ciento en el cuarto trimestre del año pasado frente al inmediato anterior, en los establecimientos de las industrias manufactureras se incrementó 0.3 por ciento, en las empresas de comercio al por mayor se incrementò 2.4 puntos porcentuales, en el comercio al por menor 0.5 puntos y en las empresas del sector de los servicios privados no financieros se elevó 0.3 por ciento.

En el caso de Nuevo Leòn, el ICUMO en la industria manufacturera se incrementò 3.8 por ciento, mientras que en el comercio creció 34.4 y 4.3 puntos en los comercios mayoristas y minoristas, respectivamente.
Crecen ventas minoristas.

Las ventas al menudeo en Nuevo Leòn se incrementaron 21.6 por ciento en enero de 2016, en relaciòn al mismo mes del año pasado.
Esta cifra es casi cuatro veces màs que la tasa de crecimiento registrada por las ventas minoristas a nivel nacional (5.2 por ciento).

Por otro lado, las ventas al mayoreo siguen mostrando señales de debilidad. En enero de 201 las ventas mayoristas disminuyeron a una tasa anual de (-3.4) puntos porcentuales, aunque se incrementaron el personal ocupado y las remuneraciones promedio en términos reales en este sector comercial.

* El autor es economista de la UANL, con Doctorado en la Escuela de Graduados de Administración y Dirección de Empresas (EGADE) del ITESM. Es profesor de la Facultad de Economía de la UANL y miembro del SNI-Conacyt.

Esta es una columna de opinión. Las expresiones aquí vertidas son responsabilidad únicamente de quien la firma y no necesariamente reflejan la postura editorial de El Financiero.

También lee: