A pesar de que hay sólo dos candidatos presidenciales con probabilidades reales para suceder a Barack Obama a la Casa Blanca, los economistas de Estados Unidos ni siquiera consideran a Donald Trump como una de las primeras dos opciones para manejar de forma adecuada a esa economía.
De acuerdo con una encuesta recién publicada por la Asociación Nacional para la Economía de los Negocios (NABE, por sus siglas en inglés), Hillary Clinton va al frente por una amplia ventaja en ese rubro.
Ante la pregunta ¿Cuál candidato haría el mejor trabajo como presidente para manejar la economía?, la demócrata registró el 55 por ciento de preferencia, seguida de Gary Johnson –candidato del partido libertario- con 15 por ciento, y al final Donald Trump, con 14 por ciento. El 15 por ciento restante no sabe o no emitió su opinión.
La encuesta de la NABE fue realizada entre el 20 de julio y el 2 de agosto, es decir, después de la convención republicana, en donde oficialmente Donald Trump se convirtió en el candidato a la presidencia. El sondeo fue realizado entre 414 miembros de la asociación.
Según Vaughn Henry, director de la NABE, el sentimiento de los economistas respecto al efecto que tienen las elecciones presidenciales en la economía norteamericana no es muy positivo.
"Más de 60 por ciento de los encuestados cree que la incertidumbre sobre la elección presidencial está deteniendo el crecimiento de Estados Unidos", dijo el directivo.
Otro de los temas relevantes que arrojó la encuesta fueron las cuatro prioridades de los candidatos elegidas de un bloque de 18 temas. Aunque las respuestas fueron variadas, tres coincidieron con más del 10 por ciento de las respuestas de los participantes. El primero es incrementar el crecimiento económico, con 15 por ciento de las respuestas, el segundo es la lucha en contra del Estado Islámico y el terrorismo, con 12 por ciento, y el tercero es una reforma fiscal, con 11 por ciento.