Los precios del petróleo registraron su mayor alza en las últimas tres semanas después de conocerse un inesperado descenso en las reservas estadounidenses de crudo, al tiempo que las refinerías elevaron la producción y las importaciones bajaron.
El convenio del crudo WTI de referencia en Estados Unidos para entrega en mayo repuntó 4.96 por ciento, para terminar en 37.70 dólares por barril.
Por su parte, el crudo Brent para entrega en junio subió 4.81 por ciento, para cerrar en 39.69 dólares por barril, borrando un mínimo de 37 dólares alcanzado el 3 de marzo.
La pronunciada alza de hoy coloca al Brent de nuevo cerca de la barrera psicológica de los 40 dólares y da un respiro a los mercados, pendientes de las ásperas negociaciones entre los principales productores mundiales para congelar su nivel de producción
Los futuros del crudo ampliaron las ganancias al publicarse que las existencias de crudo en Estados Unidos cayeron en 4.9 millones de barriles en la semana pasada, contra las expectativas de analistas de un alza de 3.2 millones de barriles.
Por el contrario, las reservas de gasolina aumentaron en el primer consumidor mundial de petróleo en 1.4 millones de barriles la semana pasada, mientras que las de destilados, donde está incluido el diesel, avanzaron en 1.8 millones de barriles.
Sin embargo, el mercado recibió el mayor impulso de las declaraciones de Kuwait sobre que había "indicaciones positivas de que se logrará un acuerdo" sobre la producción durante la reunión del 17 de abril en Qatar.
Funcionario del Banco Mundial desestimaron una fuerte alza en los precios del petróleo si los principales productores petroleros alcanzan un acuerdo para congelar el bombeo este mes en Doha.