El cobre y el zinc perdieron un 25 por ciento de su valor este año, mientras que el níquel cayó más de un 40 por ciento, presionados por la desaceleración económica en el mayor consumidor, China, el exceso de suministros y la fortaleza del dólar.
En tanto, las preocupaciones sobre suministros más ajustados limitaron las pérdidas del plomo a un 4 por ciento, mientras que el aluminio y el estaño cedieron un 19 y un 24 por ciento, respectivamente, por preocupaciones sobre un superávit en el mercado.
La fortaleza del dólar encarece el valor de las materias primas en moneda estadounidense para los tenedores de otras unidades.
Los inversores esperan que los metales básicos hayan superado lo peor. Pero algunos gerentes de fondos y analistas prevén mayores pérdidas el próximo año antes de que las mineras reduzcan de forma significativa la producción para contrarrestar la desaceleración de la demanda.
El cobre referencial en la Bolsa de Metales de Londres cerró 2015 en 4.705 dólares por tonelada, tras caer un 0.6 por ciento el jueves.
Gran parte de la atención del mercado el próximo año estará en China, el mayor consumidor mundial de metales industriales, y particularmente en sus datos sobre producción industrial, que tienen una fuerte correlación con la demanda de metales.
Entre otros metales industriales, el aluminio cayó 1.4 por ciento el jueves, a 1.506 dólares por tonelada, mientras que el zinc cedió 1.4 por ciento, a 1.609 dólares por tonelada, y el plomo subió 0.8 por ciento, a 1.793 dólares por tonelada.
En tanto, el estaño perdió 0.7 por ciento, a 14.550 dólares por tonelada, mientras que el níquel ganó 1.3 por ciento, a 8.810 dólares por tonelada.
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