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‘Leches’ vegetales le quieren comer el mandado a la de vaca

Los consumidores intolerantes a la lactosa que han explorado nuevas alternativas de bebidas, han impulsado a marcas como Silk de Danone, Nature’s Heart, Ades y Calahua, y en algunos casos, sus valores casi se han triplicado en este año.

El interés de los consumidores intolerantes a la lactosa por explorar nuevas alternativas de bebidas, ha llevado a marcas como Silk de Danone, Nature's Heart, Ades y Calahua a dar la 'pelea' a los productores de leche de vaca con alimentos sustitutos que son hasta el doble de caros y más rentables.

En los últimos cuatro años el valor de las bebidas de origen vegetal como almendra, soya, arroz y coco casi se triplicó al pasar de los 374.6 millones de pesos en 2013, a un estimado de 998.7 millones de pesos para el año que está por concluir.

Grupo Danone es líder en el mercado de bebidas sustitutas de la leche con el 60.7 por ciento, seguido de Terraholding Group, que con la marca Nature´s Heart y bebidas hechas a base de almendra, coco y arroz, detenta el 16.5 por ciento, de acuerdo con datos de Euromonitor.

"Vemos en el mercado de bebidas de origen vegetal uno de los nichos más importantes para crecer, si tomamos en cuenta que para Danone la rentabilidad de los productos lácteos frescos es del 17 por ciento, mientras que el de estas bebidas (vegetales y sustitutas) asciende al 20 por ciento", explicó Fabrice Salamanca, VP de asuntos corporativos y legal de Grupo Danone, quien maneja la marca Silk, fabricante de la leche de almendras.

Danone estima que para el cierre de 2017 sus ingresos por concepto de la bebida de origen vegetal sean de 450 millones de pesos, con una producción anual de cerca de 10 millones de litros a través de la planta que opera en San Luis Potosí.

Para el año próximo espera un alza de 20 por ciento en ingresos con esta categoría. "Tenemos previsto que para el cierre del 2018, los ingresos de Silk sean de 540 millones de pesos, lo que significaría un aumento del 20 por ciento frente a lo abonado este año", detalló el ejecutivo en entrevista.

Esto ha hecho que empresas mexicanas como Lala diversifiquen su portafolio con el lanzamiento desde 2015 de su leche Soy Salud, que cuenta con bebidas de almendras y de soya. En el caso de Alpura, aún no tiene intenciones de entrar en el negocio de estos productos.

"Nos ha afectado un poco sí (la competencia de bebidas vegetales), pero Alpura cree en que los beneficios de la proteína láctea, que es superior a la de estas bebidas. Además te puedo decir que estas bebidas han ganado un poco de mercado pero su calidad proteica no es igual a la de la leche", dijo Eduardo Galindo, director del Centro de Investigación y Desarrollo Alpura.

Según información de las empresas, el mercado global de la leche de origen vacuno crece a un ritmo de 3 por ciento anual, frente al 14 de las 'leches' de origen vegetal.

Expertos explicaron que el mayor consumo de sustitutos lácteos se debe a los beneficios y cualidades nutrimentales que poseen estos líquidos, como fuente de antioxidantes, potasio, calcio y proteínas, con un bajo contenido de colesterol y calorías.

También es usado en sustitución de leches de origen animal, a las que algunas personas son intolerantes.

De acuerdo a la consultora de mercados Euromonitor International, el volumen desplazado de estas bebidas se incrementará 106 por ciento entre 2013 y 2017, al pasar de 11.5 millones de litros a un estimado de 23.7 millones para finales de este mes.

México se encuentra en la novena posición a nivel mundial en términos del tamaño de mercado para estas bebidas alternativas de arroz, coco, almendra y soya, por encima de países como Italia. Las naciones que lideran son China, Estados Unidos, España y Canadá, según Euromonitor.

Vicente Gómez, presidente de la Federación Mexicana de Lechería (Femeleche), explicó que aunque el consumo de leches vegetales se ha incrementado en los últimos años, esto no representa algún tipo de riesgo para el sector tradicional en el país.

El precio de un litro de la bebida de almendras más que duplica el de leche de vaca de bovino, al comercializarse en un promedio de 39 pesos frente a los 17 que cuesta la leche fresca en autoservicios.

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