Ante el incremento de tasas de interés por parte del Banco de México y una inflación por encima de lo esperado producto del gasolinazo, el consumo turístico nacional se deteriorará, prevén especialistas en la materia.
"Esperamos que la tasa de interés de referencia (de Banxico) llegue al cierre de año a 7.5 por ciento, por lo que se terminó el crédito barato y gran parte del consumo turístico es financiado. Otro factor es que con los salarios actuales y la inflación (...) el poder real adquisitivo se va a reducir", advirtió Gerardo Herrera, economista especializado en turismo por la Universidad Iberoamericana.
"Además el gasto en turismo es algo discrecional, si se cae el consumo general -que esperamos que sea de 2 por ciento-, el turismo lo hará más que proporcionalmente", agregó Herrera.
El índice complementario de confianza del consumidor, que señala si las personas consideran que durante los próximos 12 meses el encuestado o alguno de los integrantes de su hogar tendrán posibilidades económicas para salir de vacaciones, cayó en enero 14.6 por ciento de manera mensual y 5.3 por ciento de forma anual.
Además, la semana pasada el Banxico colocó su tasa de referencia en 6.25 por ciento, 50 puntos base más.
En tanto, la inflación en enero de 2017 fue de 4.7 por ciento anual, por encima del rango objetivo de Banxico de 3 por ciento +/- un punto porcentual.
Para Miguel González, académico de la Facultad de Economía de la UNAM, es posible un deterioro con un cambio de tendencia.
"Ante situaciones complicadas en el país, la gente lo que busca es la distracción, lo que puede suceder es que pueden reducir los días de vacaciones y visitar lugares menos caros, ir a pueblos mágicos en lugar de playas", añadió.
El turismo nacional representa el 75 por ciento del total, es decir, por cada mil pesos que se consumen en México por motivos de viajes, 750 lo realizan mexicanos y el resto extranjeros.
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