La realidad económica internacional y nacional demanda soluciones y no sólo interpretaciones de la academia, por lo que es necesario que desde las universidades se creen alternativas que permitan generar soluciones, así como romper con el distanciamiento que hay con las autoridades, afirma José Antonio Quesada, presidente de la Fundación Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
En una plática con El Financiero, el expresidente del IMEF asegura que "la actual situación económica internacional obliga a la academia a reflexionar desde varias disciplinas, por lo que una reunión con expertos en el tema cobra relevancia, nos obliga a reflexionar sobre cuál es el estatuto actual de la ciencia económica y su vínculo con otras ciencias".
Y es que ante el cambio estructural que está viviendo nuestro país y los distintos escenarios internacionales se debe tener a la academia como aliado para ir calibrando el cambio y termine siendo óptimo y benéfico, pues puede ser que con lo que se modificó no se haya cambiado el comportamiento o las inversiones hacia México.
En el marco del Premio de Investigación Financiera, organizado por el IMEF y la firma de servicios profesionales Ernst & Young (EY), el cual reparte un premio de 500 mil pesos, Quesada detalla que tan sólo la caída de los precios del petróleo no favorecen una inversión bajo las condiciones que se tenían pensadas. Por lo que el entorno internacional también es importante, de ahí que "tenemos que modificar las condiciones como país para que podamos seguir siendo atractivos y debemos hacerlo en las demás áreas".
Añade que hoy más que nunca es clave para México contar con la innovación de los investigadores, académicos y estudiantes universitarios para elevar la competitividad del país y convertir en oportunidades los desafíos que impone la coyuntura internacional.
El presidente de la Fundación IMEF advierte que México tiene muchas particularidades, como de concentración, que debe monitorear, y una alta exposición a los temas de innovación y una nueva economía por la vecindad con Estados Unidos, cuya economía es más evolutiva.
De ahí que debe haber una investigación más aplicada. Entablar diálogos para orientar a nuestros políticos y a la sociedad del camino que se debe seguir.
Por ejemplo, dice Quesada, "las políticas públicas y macroeconómicas que se siguen, como lo fue la reforma fiscal, la cual pudo haber incurrido a un menor apoyo a las personas de bajos ingresos, de ahí el incremento de la pobreza en nuestro país, o el tema próximo de los Presupuestos de Base Cero que afecte todavía más a la exposición de esta capa de la población que son las más favorecidas".
Con el fin de que las ideas y soluciones de la academia no terminen en sólo un análisis, la estrategia, comenta el contador público será la publicación de un libro que pueda empujar la Fundación IMEF para su difusion con las autoridades o en el caso de que sea relevante, además del premio económico, que se presente en un foro.