La Organización de Trabajadores Teamsters de Estados Unidos, que aglutina a diversos sectores, entre ellos el camionero, está presionando al presidente Donald Trump para que elimine del TLCAN una disposición que permita que los camiones mexicanos de largo recorrido operen en los Estados Unidos.
El presidente de la agrupación discutió una disposición contenciosa del Tratado de Libre Comercio que permite viajes trasfronterizos originarios de México cuando se reunió con Donald Trump el pasado 11 de enero.
El sindicato, que durante años ha expresado su preocupación por permitir camiones mexicanos en las carreteras estadounidenses, dijo que el mandatario estadounidense parecía abierto a la idea de rechazar la disposición si avanzaba con su promesa de campaña de renegociar el acuerdo comercial.
"Lo importante es que tenemos un diálogo abierto con la administración en torno a ello; es algo que creemos que la nueva administración seguirá adelante", señaló el vocero de los camioneros. El presidente Trump no ha hecho ninguna declaración pública indicando planes de eliminar la disposición provisional como parte de una reapertura potencial del TLCAN.
LARGA BATALLA
Los Teamsters además están peleando contra la disposición en los tribunales. La unión, junto con otras organizaciones, está demandando al Departamento de Transporte en un intento de revertir la decisión de la agencia de permitir la operación de camiones mexicanos en los Estados Unidos.
La demanda fue presentada en el Tribunal de Apelaciones de los Estados Unidos para el Noveno Circuito en 2015. Los argumentos orales para el caso serán escuchados por un juez federal en marzo.
La implementación de la disposición para camiones contenida ya ha sido bloqueada varias veces desde que el acuerdo comercial entró en vigor en 1995.
Un programa piloto creado durante la administración de George W. Bush fue desmantelado por el Congreso de ese país menos de dos años después. La administración Obama lanzó otro piloto en 2011, después de que México impuso más de 2 mil millones de dólares en aranceles de represalia contra los Estados Unidos por no cumplir con las disposiciones del TLCAN para transportistas.
CUESTIONES DE SEGURIDAD PLANTEADAS
Los detractores citaron preocupaciones de que los camiones procedentes de México podrían ser menos seguros que los estadounidenses y que los choferes no habrían sido entrenados para cumplir con las leyes de conducción de Estados Unidos.
Informes tanto de la Administración Federal de Seguridad de Autotransportes y el Servicio de Investigación del Congreso encontraron que los transportistas mexicanos que participan en el piloto transfronterizo operaban a niveles de seguridad iguales o mejores que los de Estados Unidos y Canadá.