PARÍS.- El Club de París hizo un llamado al gobierno de Argentina para que inicien negociaciones formales en la semana del 26 de mayo que tengan como resultado un acuerdo para el pago de la deuda vencida que el país sudamericano tiene con el organismo y que dejó de cubrir en 2002.
En un intento por terminar las diferencias con sus acreedores, Argentina hizo una oferta en enero para el repago de cerca de 9 mil 500 millones de dólares que debe a los países miembros, esfuerzo que mejoraría sus lazos con la comunidad financiera internacional en momentos en que atraviesa una crisis de liquidez.
"Ellos discutieron la propuesta en enero y febrero, pidieron algunas aclaraciones y, en base a una propuesta revisada, hemos invitado al gobierno de Argentina a venir a negociar a París en mayo un acuerdo sobre sus atrasos con los acreedores del Club de París", dijo a Reuters la secretaria general del organismo, Clotilde L'Angevin.
Sin embargo, en Buenos Aires el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, dijo que Argentina no había recibido ninguna comunicación formal del Club de París.
Una portavoz del Ministerio de Economía ratificó que Argentina no presentó una propuesta de repago al organismo, sino lineamientos para una potencial negociación sobre los cuales prefirió no dar detalles.
Ante la ausencia de un programa con el Fondo Monetario Internacional, lo que Argentina se niega a gestionar, las reglas del Club de París prohíben reducir el valor de la deuda de un país acreedor.
Un acuerdo con el organismo financiero le abriría nuevas fuentes de crédito internacional a la tercera economía latinoamericana y ayudaría a apuntalar las reservas de su Banco Central, que se derrumbaron por la escasez de dólares.
Alemania es el principal acreedor del país sudamericano dentro del organismo, con 30 por ciento de la deuda, seguida por Japón con 25 por ciento. Entre los tenedores más pequeños se encuentran Países Bajos, España, Italia, Estados Unidos y Suiza.
Los operadores de los mercados dijeron que se dispararon órdenes de compra entre inversores institucionales por el optimismo de un eventual acuerdo entre las partes. Los bonos soberanos, la bolsa de valores y el riesgo país capitalizaron la noticia.
"El anuncio del Club de París es bueno para generar confianza, se trata de una vieja traba que tenemos en el mercado. Igualmente hay que ser prudentes porque será el inicio de una negociación, lo que no implica que el acuerdo esté asegurado", dijo un agente bursátil.
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