La generación del milenio, conocida como millennials, según dan cuenta innumerables encuestas, no son fans de los grandes bancos. Son consumidores inteligentes, sensibles a los precios y cambian de banco con más facilidad que los clientes más antiguos si es que encuentran mejores condiciones.
Por otra parte representan un grupo demográfico enorme e irresistible para el sector financiero, por lo que los bancos están haciendo todo lo posible para asegurarse de que estos clientes nativos digitales permanezcan leales una vez que han abierto una cuenta. Eso significa hacer uso de lo más moderno en medios de comunicación social, ágiles plataformas de banca móvil y ahora, en un intento por ganar algo de familiaridad con la cultura de la tecnología financiera, una aplicación para teléfonos inteligentes que permite realizar la compra de automóviles de principio a fin.
Este es el último ofrecimiento de Chase, la división bancaria de JPMorganChase & Co en EU. Chase Auto Direct, en colaboración con el servicio digital de compra de automóviles TrueCar, provee financiamiento para la compra de automóviles online. Los prestatarios aprobados que lo soliciten a través de sus teléfonos inteligentes o computadoras son guiados a una red de concesionarios afiliados a Chase que tienen el auto que han elegido, de modo que cuando llegan allí se encuentran con todo el papeleo ya listo.
Chase Auto Direct está disponible para los clientes de Chase en 30 estados y se extenderá a los estados restantes para el próximo año. El servicio permite que personas que presentan su solicitud por medio de su teléfono móvil o computadora sean dirigidos a una red de concesionarias afiliadas a Chase que tienen el coche que buscan, y cuando llegan ya está todo el papeleo listo.
"Los clientes están comprando todo en línea, incluso autos", dijo Bruce Jackson, jefe de préstamos minoristas en Chase Auto Finance. "Al unir financiamiento online con la experiencia en la compraventa de automotores, llevamos clientes pre-aprobados a nuestros concesionarios".
La mayoría de los clientes de cuentas corrientes que Chase ganó el año pasado – un 57 por ciento – son millennials. Y como todo el mundo sabe, viven en el teléfono.cambios. Chase busca aprovechar el teléfono celular.