Economía

¿Cuánto dinero de los más ricos se requiere para salvar al mundo?

El Índice Robin Hood de Bloomberg mide qué parte de su fortuna deberían donar los más ricos de cada país para generar un impacto en el cambio climático. A algunos no les alcanza.

Si un pequeño grupo de las personas más ricas del mundo cediera su fortuna, ¿podría generar un impacto real en el cambio climático?

El Índice Robin Hood de Bloomberg calculó qué cantidad de la fortuna de cada gran multimillonario se necesitaría para comprar todos los créditos de carbono necesarios para compensar el total de las emisiones locales de gases de invernadero en su país durante un año.

Como ejercicio intelectual, sólo es posible imaginar qué pueden hacer con su dinero los más ricos de 44 países –con un patrimonio estimado de 786 mil millones de dólares, o un 1 por ciento del producto interno bruto mundial- que no puedan hacer gobiernos y organismos.

La respuesta es: mucho. Sólo en China y en Brasil las mayores fortunas no bastan para "limpiar el aire" durante un año. Los 29 mil millones de dólares del inversor Jorge Paulo Lemann se acercan a saldar la cuenta de limpieza de Brasil, mientras que Jack Ma, de Alibaba Group, necesitaría duplicar sus 37 mil millones de dólares para compensar el daño causado por el mayor contaminador del mundo.

Los países en rápido desarrollo también se cuentan entre los que más perjudican el clima. Pero lo que emergió de nuestro análisis es que en Rusia e India, el magnate del gas Leonid Mikhelson y el petrolero Mukesh Ambani tienen dinero de sobra incluso después de contrarrestar las emisiones en sus respectivos países.

Los impuestos al carbono en realidad no eliminan los agentes contaminantes. Con la negociación de carbono, los gobiernos nacionales fijan un techo a las emisiones y pueden otorgar derechos de contaminación o subastar algunos permisos dentro de los límites.

Las empresas pueden comprar esos créditos que les permiten contaminar o venderlos, lo cual les proporcionaría una ganancia si no contaminan.

Las emisiones declinan cuando los gobiernos bajan periódicamente los límites.

La Unión Europea debate una propuesta de reformular el sistema de límites y negociaciones, que ya tiene 12 años y que no es efectivo en lo que respecta a aumentar las sanciones por contaminar.

Incluso si los más ricos de la UE se unieran en aras de un bien mayor, la región de 28 países aún tendría que hallar formas de llegar a un acuerdo sobre mejora de la eficiencia energética a los efectos de seguir apartándose de los combustibles fósiles y adoptar energías renovables.

Un nuevo obstáculo es el presidente Donald Trump, que ha retirado a los Estados Unidos del acuerdo sobre cambio climático de París, que proporciona pautas sobre niveles de contaminación.

Por otra parte, su fortuna, que asciende a 2 mil 900 millones de dólares, según el Índice de Multimillonarios de Bloomberg, alcanzaría en teoría sólo para un 8 por ciento de los créditos necesarios para el país.

Afortunadamente para esta fantasía de Robin Hood, los 85 mil millones de dólares del fundador de Microsoft, Bill Gates, podrían pagar más de dos años de créditos de carbono y le quedaría suficiente dinero para pagar las cuentas de los vecinos Canadá y México.

Suecia, con una economía de alta eficiencia energética que emite uno de los niveles más bajos de contaminación para impulsar la economía, sería uno de los trabajos de limpieza más fáciles para 'Robin Hood y su banda de ladrones'.

El éxito de la cadena de muebles sueca Ikea Group ha proporcionado al fundador Ingvar Kamprad, suficiente dinero para mantener el aire de su país "limpio" durante unos 150 años. No requiere ayuda.

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