Los migrantes mexicanos y el envío de remesas no se han visto afectados hasta ahora con la llegada del presidente Donald Trump. Por el contrario, al cierre de este año los envíos podrían tener un aumento de alrededor de cinco por ciento ante la mejora del empleo en Estados Unidos.
Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA Bancomer, destacó que México es el cuarto a nivel mundial en la recepción de remesas. El año pasado cerró con 27 mil millones de dólares sólo por debajo de la India, China y Filipinas.
De los 12 millones de migrantes mexicanos en Estados Unidos cerca de 8 millones pertenecieron a la Población Económicamente Activa (PEA) en 2016, lo que ha favorecido el envío de remesas hacia México, indicó el economista durante la presentación del anuario Remesas y Migración 2017 elaborado por BBVA Bancomer y el Consejo Nacional de Población (Conapo).
Según los datos del informe, el principal uso que le dan los mexicanos al dinero que reciben de los connacionales en el exterior es para alimentación y vestido, con 66.4 por ciento del total de respuestas, en el caso de los hombres.
Un 30 por ciento dijo que lo destina para pagar deudas, un 23 por ciento para comprar un vehículo y un 22 por ciento lo invierte en su vivienda.
En riesgo 590 mexicanos en EU
Entre los migrantes no documentados en Estados Unidos existe un grupo que podría tener su estancia en riesgo, ante las medidas antiinmigrantes del presidente Donald Trump. Son los dreamers, jóvenes que fueron llevados por sus padres a ese país desde su infancia y que se caracterizan por tener relativamente elevados niveles de educación.
Hasta 2016 había cerca de 750 mil dreamers protegidos por la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) decretada por el presidente Obama, de los cuales 590 mil son mexicanos.
Este beneficio migratorio y laboral no es un derecho conferido por una ley, sino por un decreto ejecutivo, el cual puede ser removido por el actual presidente.