Bloomberg

Diferencias entre Arabia Saudita y Venezuela se desarrollan en Viena

El desacuerdo consolida la formación de dos sectores que se fueron perfilando durante semanas en el seno de la OPEP: los países con problemas económicos, que buscan una reducción para evitar la abundancia de oferta y  aquellos que están dispuestos a resistir precios bajos para evitar la expansión de EU.

Mientras el ministro de Relaciones Exteriores venezolano, Rafael Ramírez, instaba a los demás miembros de la OPEP a reducir la producción de petróleo durante la reunión de tres horas que se realizó la semana pasada en Viena, se hizo evidente con rapidez la división en el seno del grupo.

Ocho países, entre ellos Angola y Nigeria, los cuales se cuentan, al igual que Venezuela, entre los más afectados por los cinco meses de declinación de los precios del crudo, apoyaron una reducción, según cinco personas a las que se informó sobre la reunión. No integraba esa lista, sin embargo, el hombre más importante entre los presentes, el ministro de petróleo saudita Ali Al-Naimi, que encabezó un grupo de cuatro países del Golfo Pérsico que manifestaron su oposición, dijeron las personas.

Eso hizo que la propuesta de una reducción, que exigía un respaldo unánime, se desechara, lo que mantuvo la producción diaria de la OPEP en 30 millones de barriles y desencadenó una caída de los precios de 10 por ciento al día siguiente.

El desacuerdo consolida la formación de dos sectores que se fueron perfilando durante semanas en el seno de la OPEP: los países con problemas económicos, que buscan una reducción para evitar la abundancia de oferta e impulsar los precios, y las usinas fiscales dispuestas a resistir precios más bajos en un intento de evitar la expansión de las compañías perforadoras de esquisto en los Estados Unidos.

"En la OPEP están los que quieren una reducción de la oferta y un inmediato aumento de precios, pero no pueden hacer gran cosa al respecto", dijo Eugen Weinberg, jefe de análisis de materias primas de Commerzbank AG en Fráncfort. "Y están los que pueden hacer algo para impulsar los precios pero no quieren hacerlo hasta que se cumplan sus objetivos, por lo cual esperan".

CENTRO DE LA OPEP

El crudo Brent, la referencia para más de la mitad del petróleo del mundo, ya había caído 32 por ciento respecto del nivel más alto del año, el de junio, cuando los ministros se reunieron en la capital austríaca el 27 de noviembre.La referencia de los Estados Unidos, el West Texas Intermediate, había experimentado una declinación similar.

Desde el comienzo fue evidente que no iba a ser una reunión más de los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo.
En el interior del edificio gris de nueve pisos ubicado cerca del Canal del Danubio que alberga la secretaría de la OPEP, los ministros se sentaron en orden alfabético ante dos largas mesas rectangulares para contestar las preguntas de la prensa.

Los cuatro países que se opusieron a la reducción –Arabia Saudita, y Kuwait, Emiratos Árabes Unidos y Qatar, que brindaron su apoyo a Naimi- son los que pueden equilibrar su presupuesto con precios del petróleo más bajos en relación con otros miembros de la organización, según cifras que recopiló Bloomberg. Arabia Saudita, el mayor exportador de petróleo del mundo, tiene activos de reservas de 745 mil millones de dólares, según datos de la autoridad monetaria del país.

También lee: