Efecto Jazz

¿Qué sabes de jazz chino? Conoce lo que se oye hoy en el Dragón (parte II)

En la entrega anterior hablamos de cómo surgió el jazz en China, a mediados de la década de 1910, y la manera en que esta música omnívora incorporó instrumentos y formas tradicionales para devolver una expresión propiamente local, que se desarrolló hasta el cierre de los salones de baile en los años 50, durante el régimen comunista.

En la entrega anterior hablamos de cómo surgió el jazz en China, a mediados de la década de 1910, y la manera en que esta música omnívora incorporó instrumentos y formas tradicionales para devolver una expresión propiamente local, que se desarrolló hasta el cierre de los salones de baile en los años 50, durante el régimen comunista.


Aquella muralla de silencio comenzó a venirse abajo a fines de la década de los 70, a través de covers de la música del pasado, mucha de ella de la época de los salones de Shanghai. Eran versiones pop que surgieron a partir de que acabó la Revolución Cultural, cuando el gobierno comenzó a perder el control sobre la cultura popular.

Aquellas primeras influencias pop, naturalmente, vinieron de las cercanías, como Hong Kong y Taiwán. Así, artistas como la taiwanesa Teresa Teng hurgaron en el acervo chino de las décadas anteriores para traerlo al día. Aquí hay un ejemplo de lo que hizo con el clásico Ye Lai Xiang, que no es un standard de jazz chino, pero ejemplifica la serie de reintepretaciones del pasado con las que en los 70 China comenzó a experimentar.

En una entrevista publicada por el Wall Street Journal en 2000,
el tecladista e historiador Liang Hepin recuerda que los años del silencio se extendieron hasta fines de los 80:

"No se escuchaba jazz ni en la radio, no hubo cintas sino hasta 1988. La primera verdadera banda de jazz que surgió después de las reformas fue Swing in Mandarin, pero se desembró cuando los miembros extranjeros se regresaron a sus países".

Para los años 90 comenzaron a abrirse algunos clubes y cafés de jazz, como el CD Jazz Café en Beijing, fundado por el saxofonista Liu Yuan, quien aquí aparece tocando en ese club.

Poco a poco el jazz comenzó a retomar aliento y, como en todo el mundo, lo más popular fue el jazz vocal, sobretodo el cantado por mujeres. Y lo sigue siendo.

Aquí les comparto algunas de las voces más reconocidas de aquella escena, que cantan en inglés y también en chino, una lengua que, como escucharán, tiene una musicalidad que le va muy bien a la síncopa jazzística:

Jasmine Chen, en una versión de Take Five en chino que suena muy bien:

Zhang Le: Hao Chun Xiao:

Mandy Chan: Ain’t No Sunshine:

La escena china ha dado lugar a festivales como el Cotai, que se realiza en Macao, el JZ, quen siendo en Shanghai es uno de los más importantes, con la presencia de figuras como Joss Stone o Victor Wooten entre muchos otros grandes nombres; o el de Beijing, que fue el primero de esta índole en aquel país.

Fue fundado por un alemán, Udo Hoffmann en 1993, y se realizó hasta 1999, después fue retomado en 2003 y mantiene su sede en el parque Haidian, donde se presentan artistas locales y de todo el mundo, del más alto nivel.

En ese escenario ha tocado, por ejemplo, Wynton Marsalis. Por supuesto, ahí también es frecuente la presencia de músicos renombrados de ascendencia china, como el estadounidense Jon Jang quien ha explorado también la música china del pasado:

Entre los músicos reconocidos dentro y fuera de China destacan saxofonista como Du Yinjiao y Li Gaoyang, éste último tiene una amplia trayectoria internacional, es líder de su cuarteto y un prolífico compositor.

Shangai mantiene su apertura multicultural. Ejemplo de ello es Chekov, un ensamble de fusión integrado por músicos de diversas nacionalidades, que mezcla jazz con electrónica y rap.
Aquí, en la final del Cotai Jazz & Blues Festival, en Macao.

Y para cerrar esta probadita contemporánea, uno de los últimos hitos, el “niño prodigio”: A Bu. Una suerte de Lang Lang de nueva generación que cuanta con 15 años y se ha lanzado al jazz, después de estudiar piano clásico. Una pequeña ametralladora que este año se llevó el primer lugar del concurso Parmigiani del festival Montreaux Jazz en piano solo.

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