Triste jueves en El Pedregal

La fachada de la casa de Gabriel García Márquez en la calle de Fuego 144 de El Pedregal, donde vivió por más de 40 años, es estilo provenzal: blanca con madera, una enredadera de bugambilias que sube por una pared y un faro rústico.

En frente de esta puerta, poco después de que la periodista Fernanda Familiar tuiteará a las 14:38 horas: "Deja de latir el corazón de García Márquez", la gente se empezó a aglutinar.

Alrededor de 100 medios nacionales e internacionales esperaban impacientes en la calle alguna declaración de la familia del escritor. La periodista Fernanda Familiar, el director del IMCINE, Jorge Sánchez, y el escritor colombiano Guillermo Angulo llegaron a casa del Premio Nobel, pero ninguno quiso hablar con los medios.

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La espera continuaba, pero nadie salía de la casa del Pedregal. Más de diez elementos de seguridad pública llegaron para tratar de controlar a la gran cantidad de medios congregados.

También algunos admiradores de García Márquez llegaron. Una adolescente de 24 años se acercó a la puerta y dejó un ramo de margaritas para el escritor; una señora mayor de 60 años fue un ratito porque a su hija le puso Amaranta, en honor a uno de los personajes de "Cien años de soledad" (1967).

Alrededor de las 16:40 horas, arribó una carroza fúnebre color gris a casa del escritor, la cual abandonó la casa del Pedregal media hora después para dirigirse a una funeraria en San Jerónimo escoltada por tres patrullas.

Hasta el momento, más de 30 policías se encuentran en la puerta de la funeraria. A ese lugar han llegado algunos admiradores con flores, a quienes no se les permite ingresar. Quien sí pudo entrar fue el arqueólogo Eduardo Matos Moctezuma, quien declaró que la muerte de su amigo era una gran pérdida para las letras.

Las señales de la próxima muerte del escritor la tarde de ayer ya eran claras: el cardiólogo lo visitó dos veces en su domicilio; su mejor amigo, el director de IMCINE, Jorge Sánchez, estuvo varias horas con él, y comenzaron a llegar medios colombianos, entre ellos Radio Caracol.

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En las inmediaciones de la funeraria, donde se encuentran medios nacionales, internacionales, admiradores y curiosos, existe un completo hermetismo sobre el destino del cuerpo de El Gabo, el cual, se rumora, podría viajar a Colombia este mismo lunes.

El cuerpo del autor colombiano será trasladado esta noche a su casa de El Pedregal, donde será velado. 

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