After Office

Las universidades le dicen adiós al librero

Según especialistas consultados por EL FINANCIERO, el e-book se abre paso cada día más entre las comunidades universitarias. El Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey hoy cuenta con más de 190 mil títulos electrónicos.

En México, la lectura en dispositivos digitales es un hábito que aún está por adquirirse, pese a que los libros electrónicos tienen ventajas como la portabilidad y menor costo, además de una amplia oferta de títulos disponibles, algunos de ellos gratuitos. Según datos proporcionados por la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (Caniem), las ventas de libros digitales en México representaron sólo el 0.2 por ciento del total, con una facturación de 19 millones 569 mil pesos.

No obstante la producción y distribución de estos materiales digitales está en auge en universidades públicas y privadas. A la vanguardia se ubica el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, que actualmente cuenta con una colección multidisciplinaria de más de 190 mil títulos en inglés y en español.

"El número es aproximado debido a que constantemente se agregan o retiran títulos, dependiendo de las condiciones acordadas entre editoriales y proveedores", destaca José Hugo Martínez Grimaldo, responsable de la Biblioteca Digital del TEC Campus Ciudad de México. También cuentan con el servicio de iPubs, libros digitales que prestan a su comunidad. En este campo trabajan con las editoriales Safari Books, Pearson, McGraw-Hill y EBSCO.

Con más de 30 años de experiencia en el campo de la tecnología educativa, Enrique Ruiz Velasco señala que fuera de los ámbitos académicos, los lectores mexicanos no consumen libros digitales porque desconocen sus virtudes. "El libro electrónico surge en los grupos científicos, en las universidades, si no ha tenido éxito es porque las personas no conocen las bondades que tiene sobre las publicaciones en papel; no sólo tienes texto, imagen, archivos multimedia, son dimensiones nuevas que no tiene un libro impreso. A golpe de clic, con el libro electrónico se puede uno conectar con comunidades de otros países", ejemplifica el académico del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación (IISUE).

En la Biblioteca Central de la UNAM ya es posible no sólo consultar un libro, sino descargarlo a un dispositivo móvil. Sin embargo, existen autores fundamentales que no se encuentran disponibles como Gabriel García Márquez, debido a que no se cuenta con los derechos de autor para difundir su obra. Los institutos de investigación de la casa de estudios también tienen sus propios acervos digitales. Tan sólo el de Investigaciones Estéticas cuenta con 30 mil obras a disposición del alumnado.

El gobierno federal también tiene el fomento al libro digital entre sus líneas de trabajo en el área cultural. Este año se pusieron a disposición del público 5 mil libros digitalizados en la Red de Bibliotecas de Conaculta, que pueden ser consultados gratuitamente, de acuerdo con su titular, Fernando Álvarez del Castillo. "El libro digital es incipiente, apenas vamos dando los primeros pasos, hace 20 años no existían nada de estas cosas".

La oferta no es abundante porque se trata de publicaciones que ya existían en el acervo y sólo han sido digitalizadas, explica el funcionario. La falta de un presupuesto hace imposible llegar a un acuerdo con las editoriales: "Los materiales de lectura contemporáneo, los derechos de autor están en poder de las editoriales y las familias, de acuerdo con las últimas modificaciones de ley, éstos caducan a los cien años".

LA APUESTA DE AMAZON

A pesar de que los indicadores no tienen bien posicionado a México en los niveles de lectura, la empresa Amazon tiene un ambicioso plan que va enfocado principalmente a las nuevas generaciones.

"En los últimos 18 meses nuestra selección de contenido en castellano ha pasado de 70 mil títulos digitales a 110 mil. La respuesta de los lectores mexicanos ha sido muy positiva, por eso lanzamos un nuevo programa en nuestra tienda para acceder a dos millones de títulos", señala Pedro G. Huerta, director de Kindle para América Latina.

Por un costo de 129 pesos mensuales, los lectores mexicanos pueden acceder a más de 750 mil títulos en varios idiomas y 30 mil en castellano. El primer mes es gratuito, señala Huerta, además se puede utilizar hasta en seis dispositivos.

En la tienda Amazon, una novela de misterio de Agatha Christie se vende en 13 pesos, precio promocional, aunque el promedio es de 89 pesos por libro. "Yo siempre digo que el mexicano ya no tiene excusa para no leer", señala Huerta, quien destaca que, en línea, la marca tiene dos millones de títulos disponibles y descargar uno de ellos toma menos de un minuto.

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