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'Humanoides' conectados vía Wi-Fi que lloran, sangran y hablan

La Universidad Marista cuenta con el primer hospital lleno de 'humanoides' conectados vía Wi-Fi  que lloran, sudan, sangran y hablan, y que sirven para que los estudiantes de medicina de dicha institución forjen experiencia y lleven toda la teoría a la práctica sin poner en riesgo la salud de un paciente.

Un total de 56 pacientes robots simuladores están internados en el Centro de Simulaciones Médicas de la Escuela de Ciencias de la Salud de la Universidad Marista, el primer hospital virtual en la región sureste.

El centro recrea el ambiente de un hospital tradicional en el que los estudiantes practican lo aprendido teóricamente mediante equipos de simulación instalados en un edificio que cuenta con las áreas clínicas de atención de urgencias, consultorio, una sala de terapia, ginecología, neonatología, una sala de recién nacidos con patologías, un quirófano y una sala de simulación de patologías cardiacas.

El encargado del Centro de Simulaciones Médicas, Gregorio Cetina Sauri, trabajó en el diseño, desarrollo, selección y adquisición de los simuladores idóneos con el fin de que sean una herramienta de apoyo a la docencia y formen parte de un proceso de enseñanza completo, basado en el modelo educativo de competencias.

Los tres módulos principales del hospital son el aprendizaje teórico, la aplicación práctica y la evaluación. 

"Actualmente el educando va al campo clínico y en el paciente hace lo que aprendió teóricamente, pero no hay un paso previo donde pueda tener una práctica sin que pueda tener un error; con estos simuladores el que gana es el paciente real, pues va a tener un médico con una habilidad ya practicada y eso le da una mayor seguridad en la atención", comenta Cetina Sauri.

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SOFTWARE

LLEAP (Laerdal Learning Application) es un software diseñado por la empresa de equipos médicos y productos de entrenamiento médico Laerdal.

El programa es compatible con los simuladores de paciente Laerdal, maniquíes robóticos de cuerpo completo y medio cuerpo que presentan una gran variedad de signos vitales, signos clínicos y síntomas. Los simuladores tienen un router que se conecta por wifi a un centro de mando que se controla mediante la interfaz gráfica de una tableta y del monitor incluido.

"Los maniquíes logran alcanzar cualidades humanas muy reales; el software es básico, bastante bueno para el usuario y fácil de entender. Permite crear un escenario que se ejecutará en modo automático y se pueden generar respuestas improvisadas mediante el modo manual para que el paciente mejore o empeore, según el desempeño del estudiante", comenta Joenna Cambranis Romero, ingeniera biomédica del centro.

TIPOS DE SIMULADORES


Todos los simuladores son mecánicos, pero de acuerdo con su desarrollo electrónico están clasificados en tres niveles. Los de alta fidelidad son para el aprendizaje de destrezas complejas; los de mediana fidelidad son para el uso de estudiantes de semestres menos avanzados que requieren hacer prácticas repetitivas; y los de menor fidelidad son para destrezas sencillas, orientados al uso altamente frecuente y masivo.

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Simulador de alta fidelidad 

Son cuatro pacientes que tiene un funcionamiento muy parecido al del ser humano gracias a tarjetas de sensores, compresores de respiración, liberación de lágrimas, sudor y sangre. También reproducen sonidos en vivo a manera de diálogo, reconocen medicamentos y se les dilatan las pupilas, entre otras cosas.

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Simulador de mediana fidelidad 

Están orientados hacia la enseñanza de enfermería y cuidado de pacientes. Cuentan con sonidos estabilizados para el tratamiento de heridas y hablan a través de un Mbox. Estos robots se controlan a través de una tableta en la que pueden observarse la frecuencia cardiaca, saturación de oxígeno y el tipo de onda del corazón, además a todos se les puede practicar intubación y colocación de sondas

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Simulador de menor fidelidad 

Son completamente mecánicos y usados por alumnos de primeros semestres. Se componen de modelos de torax que sirven para la enseñanza de reanimación pulmonar, brazo hechos a partir de materiales que simulan piel humana para la práctica de inyecciones, cabezas para intubación de adultos, de niños y bebés.

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