Así se construye un humanoide hollywoodense

Como muchos niños con una imaginación disparada por las películas animadas, el diseñador gráfico y de producto de Hong Kong, Ricky Ma, creció viendo caricaturas que protagonizaban aventuras de robots, y él siempre soñó con construir uno propio algún día.

A diferencia de muchos, Ma cumplió su sueño de la niñez a la edad de 42 años, al conseguir construir un robot de tamaño real desde 0, en el balcón de sus casa.

El fruto de su trabajo de año y medio, y de un presupuesto de más de 50 mil dólares, es una mujer robot prototipo llamada Mark 1, modelada a partir de la imagen de un estrella de Hollywood de la cual no quiso revelar su nombre, pero vamos, a simple vista es muy claro quién es. El desarrollo responde a un set de comandos verbales hablados a través de un micrófono.

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"Descubrí que debía de hacerlo cuando el tiempo fuera el correcto y realizar mi sueño. Si cumplía mi sueño, no tendría nada que lamentarme en mi vida", dijo Ma, quien tuvo que aprender acerca de campos completamente nuevos para él antes de lograr construir el gadget.

Más allá de los movimientos de brazos y piernas, voltear la cabeza y poder hacer reverencias, el robot de Ma, que tiene cabello castaño y 'ojos líquidos', y que viste una playera blanca y un top, puede hacer expresiones faciales detalladas.

Detrás de la piel de silicón del Mark 1 coexiste un esqueleto impreso en 3D, que envuelve las piezas mecánicas y eléctricas del dispositivo. Aproximadamente el 70 por ciento del cuerpo fue creado utilizando impresión 3D.

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El periodo de creación para Ma fue solitario. El especialista dijo que no conocía a nadie en la excolonia británica que construyera humanoides por hobbie y unos pocos en la ciudad entendieron sus ambiciones.

"Durante este proceso, muchas personas dijeron cosas como '¿Eres estúpido? Esto requiere mucho dinero. ¿Realmente sabes cómo hacerlo? Es muy difícil", dijo Ma.

Él adoptó un método de desarrollo de acierto/ error en el que encontró diversos obstáculos que van desde una constante quema de motores eléctricos que hacían que el robot perdiera el balance.

"Cuando ves todo junto, eso fue realmente difícil", dijo Ma, quen tuvo que dominar tópicos pocos familiares para él, desde electromecánica hasta programación, durante el camino, además de tener que aprender cómo hacer que la piel externa del robot entrara dentro de los componentes.

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Ma, quien cree que la importancia de los robots sólo irá a la alza, espera que un inversor compre este prototipo, dándole más capital para construir otros, además quiere escribir un libro sobre su experiencia en función de ayudar a otros entusiastas.

La ola de robots y de inteligencia artificial se encuentran entre los disruptivos de los cambios en el mercado laboral que el Foro Económico Mundial proyecta que generarán una pérdida de 5.1 millones de empleos durante los próximos 5 años.