CIUDAD DE MÉXICO. Organizaciones de la sociedad civil advirtieron que en México existe un atraso de casi cuatro años en la regulación de emisiones contaminantes que emiten los vehículos, particularmente de los precursores de ozono.
Ante ello, hicieron un llamado a las autoridades del país sobre la urgencia de actualizar el marco normativo y dar paso a una nueva política integral de largo plazo que regule las emisiones de los automóviles, para así poder contar con nuevas tecnologías y combustibles que ayuden a salvaguardar la salud de la población.
De acuerdo con Leticia Pineda, analista de políticas públicas de Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA), la falta de actualización de la Norma Mexicana 042, la que data del 2005 y que fue actualizada en 2010, mantiene hoy al país "en un grave retraso", con relación a las políticas implantadas en Europa y Estados Unidos, donde sus niveles de contaminación son ahora ocho e incluso diez años menores.
Kate Blumberg, especialista del Consejo Internacional de Transporte Limpio (ICCT, por sus siglas en inglés), explicó que los estándares de México son "muy laxos", pues en Estados Unidos, la última regulación denominada TIER3 implica una reducción de azufre en las gasolinas de diez partes por millón, con lo que las emisiones evaporarían de la gasolina serán casi de cero.
Y pese a que en México los vehículos que actualmente se venden cuentan ya con tecnologías que permitirán estándares más limpios, muchos de dichos avances requieren de la utilización de combustibles con bajo contenido de azufre, el cual todavía no está disponible en el país.
La actualización de la Norma 042, complementó Cynthia Menéndez, del CTSEmarq México, evitaría que hasta 2.4 millones de toneladas locales al 2035, "lo que equivaldría a detener la actividad vehicular de toda la flota de la Zona Metropolitana del Valle de México por más de un año".
Asimismo, dijo que el número de autos a gasolina a nivel nacional está creciendo en promedio 4.8 por ciento anual, muy por encima del crecimiento del Producto Interno Bruto nacional y 1.2 por ciento arriba del crecimiento poblacional.
Por otro lado, la analista de políticas públicas del CEMDA señaló que emisiones contaminantes de los vehículos al mezclarse en el ambiente y con la luz del sol dan paso al ozono, el cual se encuentra en la capa baja de la atmósfera, donde sus efectos llegan a ser muy nocivos a la salud.
"Hay evidencias que no sólo demuestran que puede presentarse problemas respiratorios, sino también afectaciones al sistema nervioso central, cáncer y problemas reproductivos. El ozono inflama las membranas del sistema respiratorio generando inflamación de las vías respiratorias y reduciendo la función pulmonar, puede incrementar los cuadros de problemas cardiovasculares, y las muertes prematuras derivadas de padecimientos cardiopulmonares", explicó.
Por lo anterior, indicó existe mucho trabajo por hacer no sólo para actualizar las normas, sino para implantarlas y concluyó que el objetivo de estos instrumentos debe ser siempre la protección de la salud de la población, la cual hoy se ve muy afectada por la contaminación del aire proveniente de los vehículos.