Sociedad

La historia de Toto y Naid impulsa la protección animal

Un oso negro, un león y un tigre de bengala, además de otros animales que tenía en su poder el Harley Circus, lograron que el Congreso de Yucatán aprobara una ley en contra del abuso animal. 

MÉRIDA. Los actos de animales, atractivo principal de los circos por muchos años, quedaron prohibidos en Yucatán gracias a la aprobación de una ley que impide la exhibición de animales en peligro de extinción, o protegidos por la ley de fauna mexicana.

Para asombrar al público con la valentía del domador que enfrenta a los leones, tigres y hace bailar a los osos; sin antes demostrar la furia del látigo, se descubrió la crueldad a la que estos ejemplares son sometidos para el acto. Por ello esta nueva ley dará certeza a las acciones que las autoridades han realizado en los últimos meses, asegurado diversas especies por las condiciones tan desfavorables en que se tenían.

Luego de conocer la historia del oso negro Naid, el león Toto, el tigre de Bengala Kalimán, de los monos arañas Tobías, Tiberio y Camilo, así como de la cebra Patricia y las llamas Cuzco y To, que tenían problemas de salud y temperamento por culpa del circo Harley, donde por espacio de más de ocho años permanecieron encerrados en una jaula de seis metros por dos, divida en cuatro compartimientos, uno para cada especie, la sociedad yucateca se conmovió y pidió leyes más severas.

La historia salió a la luz pública por medio de una llamada anónima a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente en Yucatán, en donde se informaba que el Harley, instalado en el municipio de Dzidzantún, tenía animales con serios problemas de maltratados.

El delegado la dependencia en Yucatán, José Lafontaine Hamui, señaló que se constató la situación de los ejemplares y se procedió a decomisarlos, por trato indigno. Para su atención y recuperación, los animales se llevaron al parque zoológico del Centenario en Mérida, donde permanecen bajo la supervisión de una especialista, quien considera que tendrán mejoría, pero el daño ocasionado a estas especies es irreversible.

En entrevista con El Financiero, el jefe del Parque Zoológico del Centenario, William Cabrera Borges, explicó que el tigre Kaliman, de ocho años de edad, presenta distrofia muscular, anemia y casi no se mantiene en pie; tiene un severo cuadro depresivo del cual difícilmente saldrá. Por su parte, el León Toto, de siete años de edad, fue diagnosticado con desnutrición, deshidratación, sin condición muscular en las piernas y no tiene garras ni colmillos, al igual que los monos.

El caso más triste es Naid, el oso de ocho años, que tiene amputada la mandíbula; muestra opacidad en las córneas por desnutrición avanzada; además un estado anímico deprimido, poco reactivo al ambiente circundante, laceraciones en el cuello causada por la cadena de que lo aprisionó y crecimiento de masas a la altura de las vértebras cervicales, así como amputación de sus garras, desde las falanges distales.

Para mantenerlo se dio atención especial y una mejor alimentación en base de carne, vitaminas y proteínas licuadas, pero por ingerir alimentos sufre de una severa infección en su herida que no logra cicatrizar. Según su dueño, está cirugía se le realizó por un problema que presentó en una muela, hace poco más de un año.

Ante esta acción, se levantaron las voces de la sociedad civil a través del movimiento Animalista Ciudadano, Anima Naturalis, Evolución Animal y Asociación Mexicana por los Derechos de los Animales, quienes pidieron al Congreso Local prohibir estas prácticas.

El diputado local, Mauricio Vila Dosal, presidente de la Comisión de Medio Ambiente del legislativo local, indicó que Colima, Guerrero, Chihuahua, Querétaro, Veracruz, Morelos, Naucalpan, Estado de México; León, Guanajuato; Culiacán, Sinaloa y Zapopan, Jalisco, cuentan con una ley como ésta.

MEJORÍA DE LOS ANIMALES

Por la atención y cuidados del Centenario, los animales presentan mejoría; su pelaje luce más brillante y están saliendo del cuadro de anemia.

El oso negro "Naid", decomisado del Harley Circus en el municipio Dzidzantún, cuyo caso transcendió por tener mutilado el maxilar inferior, fue llevado a la Unidad de Manejo Ambiental (UMA) de Hidalgo.

El delegado de la Profepa, indicó que debido a las altas temperaturas de 40 grados que se registran en Yucatán, el oso sufría mucho y la mayor parte del día se la pasaba remojado en un pequeño estanque que tenía en su área.

Por ello se tomó la decisión de trasladarlo, bajo la supervisión de un equipo especializado y en condiciones de clima favorable, a la UMA de Hidalgo, considerada un santuario por su atención y calidad de sus instalaciones. La UMA es especializada en atención de animales carnívoros de todos tamaños, situación que garantiza la buena estancia de Naid, anotó.

Respecto a la prótesis que se le colocaría al Oso, Lafontaine Hamui precisó que se están haciendo los estudios necesarios y requeridos para ver qué tan factible y seguro sea realizarle la cirugía mayor. Si los estudios indican que puede haber un riesgo mayor para Naid, no tendría caso hacer sufrir más al oso y se tendría que valorar la decisión, subrayó.

Además, se está buscando un lugar en donde el oso pueda pasar sus últimos años de vida, en donde se sienta bien, sea atendido y vigilado profesionalmente como en el Parque Zoológico del Centenario de Mérida, tal y como se harán en la UMA de Hidalgo, resaltó.

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