CIUDAD DE MÉXICO. El Capítulo Mexicano de Amnistía Internacional (AI) externó su preocupación por la seguridad de más de 40 migrantes centroamericanos que fueron víctimas de secuestro y llamó a las autoridades a protegerlos.
La organización no gubernamental sostuvo en un comunicado, que de los 40 migrantes plagiados el 19 de marzo en Reynosa, Tamaulipas, por integrantes de un grupo del crimen organizado y que posteriormente fueron liberados, ninguno ha recibido apoyo o protección como víctimas del delito.
Mencionó que de ese grupo, diez personas se dirigieron al albergue Nuestra Señora de Guadalupe, pero "fueron secuestrados nuevamente y hasta el momento se desconoce su paradero", según denunció personal de ese centro de ayuda.
Sin embargo ningún investigador se ha presentado para indagar sobre los hechos, ni para conocer el paradero de los migrantes desaparecidos, expuso Amnistía Internacional.
Recordó además que un día antes del secuestro, es decir el 18 de marzo, varias mujeres que habían sido expulsadas de Estados Unidos fueron plagiadas en Matamoros, cerca del cruce fronterizo.
Una de ellas logró escapar y denunció los hechos a la policía, pero hasta el momento no se conoce el paradero de otras tres mujeres, suceso del que AI se dijo "profundamente preocupada por la seguridad de estas personas secuestradas".
La organización informó que tiene documentado la actividad de bandas criminales que actúan en la frontera México-Estados Unidos contra migrantes y los someten a graves abusos, en complicidad con funcionarios corruptos.
"Hasta el momento las autoridades no han tomado medidas efectivas para proteger a las personas migrantes de abusos tales como secuestros, extorsiones, trata de personas y violencia sexual", criticó.
En ese sentido, el Capítulo Mexicano de AI pidió a las autoridades federales y estatales una investigación completa para dar con los secuestrados de ambos casos y exhortó a las autoridades a proteger a los migrantes liberados como víctimas de delito.