Salud

Neumococo y COVID-19: ¿Quién debe ponerse la vacuna?

La infección por neumococo podría traer cuadros graves acompañados de neumonía, e incluso, meningitis.

Ante la sexta ola de COVID-19 en México por variantes como “Kraken” y el aumento en el número de casos de infecciones respiratorias en general, incluidas influenza y neumonía, los expertos han encendido alarmas y emitido algunas recomendaciones para evitar una infección.

Entre ellas, la Comisión Especial para la Atención de la Emergencia por COVID-19 de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha recomendado a la población tener su cuadro de vacunación completo, incluyendo los refuerzos contra coronavirus, influenza y neumococo, de acuerdo con la edad o condición de salud individual.

¿Qué es el neumococo?

La enfermedad neumocócica es una infección causada por una bacteria llamada Estreptococo pneumoniae, también conocido como neumococo.

Las personas con cuadros graves de la enfermedad por esta bacteria podrían experimentar neumonía, meningitis, e incluso, una infección del torrente sanguíneo (bacteremia).

Esta enfermedad afecta a los niños menores de dos años y, en algunas ocasiones, se presenta en personas mayores de 65 años, en consumidores de alcohol y tabaco en cantidades excesivas, así como a personas que padecen enfermedades crónicas como cardiopatías o que se encuentran inmunodeprimidas, señala la Secretaría de Salud.

¿Cómo se transmite?

Esta bacteria se transmite cuando una persona tiene contacto directo con las secreciones respiratorias de los portadores; “tras la exposición a neumococos existe una colonización nasofaríngea transitoria y, posteriormente, se da una propagación a las vías respiratorias bajas”, detalla la dependencia de salud.

¿Quiénes deben vacunarse contra el neumococo?

Para prevenir la enfermedad, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) señala que las personas deben aplicarse la vacuna de la siguiente manera:

  • A los 2, 4 y 6 meses de edad con un refuerzo entre los 12 a 15 meses.
  • En el caso de los adultos mayores de 65 años se aplica una dosis cada 5 años.
  • La vacuna también se puede aplicar desde los 60 años de edad, siempre y cuando sea indicada por el médico especialista en personas con factores de riesgo.

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