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Segundo capítulo: atan cabos, confesión de Aegon Targaryen y... todo listo para la Gran Guerra en GOT

#SpoilerAlert 'Mi verdadero nombre es Aegon Targaryen', confiesa Jon Snow a la Madre de los Dragones en las criptas de Invernalia.

"Mi verdadero nombre es Aegon Targaryen", confiesa Jon Snow a la Madre de los Dragones en las criptas de Invernalia frente a la escultura de Lyanna Stark.

En esta segunda entrega de la última temporada de Game of Thrones, los personajes se preparan ya para la inminente llegada del Ejército de los Caminantes Blancos... No hay vuelta atrás.

El capítulo anterior finaliza con el encuentro entre Bran Stark y Jaime Lannister, mientras que el 'cámara y acción' de este capítulo inicia con el 'matarreyes' dialogando con Daenerys Targaryen, quien está a la cabeza de una reunión de los líderes del Norte.

Jaime mantiene su promesa de luchar por los vivos, abandonando a su casa y su familia, incluida Cersei. A pesar de las posturas en su contra por parte de Sansa y la Madre de los Dragones, Tyrion y Brienne de Tarth abogan por él para que finalmente el Rey del Norte, Jon Snow, escriba la decisión: "necesitamos a cada hombre".

Mientras todos alistan armas y estrategias para luchar contra el Ejército de los Muertos, en el Árbol donde rezan a los dioses, Jaime se disculpa con Bran por haberlo empujado por la ventana, afirma que ya no es la misma persona quien habría sido tiempo atrás e intrigado le pregunta el por qué calló durante todo ese tiempo. Bran responde que de nada hubiera servido, ya que habría significado la muerte de Jaime sin haber aportado nada para el bando de los vivos.

Entonces, Lannister pregunta si lo hará después y Bran responde: "¿Cómo sabes qué hay un después?".

Theon Greyjoy regresa a Invernalia a pelear por el Norte, y también lo hacen los salvajes y miembros de la Guardia nocturna.

Durante un encuentro en el que se planifica la batalla, Jon Snow admite que no ganarán en una pelea directa, y sugiere ir contra el Rey nocturno, quien guía a aquellos cuyos ojos azules brillan durante el iniverno.

Bran, el cuervo de tres ojos, interviene para asegurar que lo quiere solo a él, ya que busca una 'Noche sin fin', y él es el recuerdo de todo.

"Si olvidamos en dónde hemos estado y qué hemos hecho, no seríamos nada", concuerda Sammuel.

La táctica brilla: Bran esperara al Rey nocturno en el árbol, y lo defenderán los hombres de las islas de hierro, comandados por Theon Greyjoy. Mientras tanto, Tyrion Lannister estará en las criptas con todos los hombres y niños, esto a petición de Daenerys Targaryen, quien lo quiere en esa posición por su valor como estratega.

Más tarde, los hermanos Lannister se sientan frente a la chimenea del salón principal del castillo de Invernalia a recordar su pasado y la idea que aceptarían sobre su muerte. Se unen frente al fuego Brienne de Tarth, Tortmund Giantsbane, Davos Seaworth y Podrick Payne.

Llega el momento emotivo de la noche: el "matarreyes" nombra caballero a Brienne. "En nombre del guerrero te encomiendo a ser valiente, en nombre del padre te encomiendo a ser justa, en nombre de la madre te encomiendo a defender al inocente. De pie Brienne de Tarth, caballero de los siete reinos", dice Lannister.

Mientras tanto, Gendry y Arya se encuentran en el taller de armas, ella recibe el encargo que solicitó la semana pasada, el cual incluía vidriagon, y después de 'danzar' con su nueva arma se acerca al bastardo de Robert Baratheon y rompe todas las barreras.

En una candente escena, Arya le susurra: "el mundo está a punto de llegar a su fin, y yo también quiero saber cómo es eso".

En otras escenas, Sammuel le entrega su espada de acero valyrio a Jorah Mormont, como una forma de agradecer las enseñanzas que le dio su padre Jeor Mormont.

El capítulo termina con Daenerys y Jon Snow en las criptas. Al frente de la tumba de Lyanna, Snow le cuenta a 'Dany' que su verdadero nombre es Aegon Targaryen, pues es hijo de Rhaegar Targaryen y Lyanna Stark.

Khaleesi -desconcertada- le responde sin titubeos que si estas palabras son verdad, entonces tiene él tiene todo el derecho al Trono de hierro, que ha perseguido durante su vida.

Antes, de que pudieran cerrar con esta confesión, las trompetas suenan tres veces y a lo lejos aparecen los generales del Rey Nocturno al frente de su ejército.

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