Península

Yucatán se sumó a la 'revolución verde', en mi administración en Sener: Coldwell

El ex secretario de Energía en la administración federal pasada, asegura que la actual crisis por electricidad en la Península no responde a fallas en su gestión.

El ex secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell aseguró hoy que, durante su cargo en esa dependencia, "se trabajó con toda responsabilidad para atender el abasto eléctrico y gasífero de Yucatán y se incorporó al Estado a la revolución verde que se está dando en el mundo desarrollado con la instalación de plantas eólicas y solares que producirán energías renovables cuando entren en funcionamiento".

Al rechazar versiones que le atribuyen haber ocultado la crisis energética en la Península, señaló que la construcción de centrales eléctricas eólicas y solares, actualmente en marcha en Yucatán, no se dio de manera casual, sino que fue resultado de una política pública de la Secretaría de Energía de la pasada administración federal, que estableció los incentivos necesarios para atraer hacia la región a las empresas especializadas en dichas tecnologías.

El también ex gobernador de Quintana Roo escribió una carta en la que señala, que en su administración también se trabajó para garantizar el abasto eléctrico y de gas en el estado, al incorporarlo en las subastas de energía limpias de la Sener, Cenace y CFE, incentivando a empresas para construir en la región.

Además, aseguró en el comunicado, que se hicieron trabajos para que el gas natural que era traído de Texas, llegara a la Península de Yucatán.

"Es conveniente precisar que, para tal efecto, se firmaron contratos por un monto de 727 millones de pesos entre los ganadores de dicha licitación y el Cenegas", afirmando que al entrar en funcionamiento las centrales eléctricas renovables y la estación de compresión de gas de Cempoala se notará el beneficio en Yucatán.

Yucatán y la Península han pasado por problemas con apagones totales durante el 2019, lo que provocó que el Cenace emitiera una declaratoria de emergencia en la operación de la producción de electricidad en la Península de Yucatán, que luego fue calificada como una medida que se tomó para apurar la instalación de un oleoducto para llevar diésel de Puerto Progreso a la Central de Mérida III.

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