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Milpa: roza, tumba y quema

Los preparativos comienzan y si el temporal es favorable, estaremos disfrutando del elote tierno, tortilla con maíz nuevo, atole y otras delicias derivadas del maíz.

El ciclo de la Milpa en Yucatán está por comenzar.

En estos días, algunos hombres de campo estarán haciendo las últimas cosechas de sus Milpas de las siembras del año pasado y arrancarán con la roza y limpieza de sus tierras.

Quienes viajen por las carreteras de la península podrán observar a los productores cosechando las últimas mazorcas y empezar con el corte de las cañas, que suelen vender como forraje para los animales y lo que queda se quemará, para después esperar las lluvias de mayo y junio.

La Milpa se realiza en la parcela, los mecates o en su caso las hectáreas que los productores destinan principalmente para sembrar maíz, pero también para frijol, calabaza, sandía o espelón; es un pequeño espacio con diversidad en cultivos, que comienza con la preparación de la tierra en abril y mayo, y finaliza en marzo del siguiente año con las últimas cosechas.

A este ciclo se le conoce como primavera-verano, y en Yucatán se dedican a la Milpa más de 50 mil productores; algunos sembrarán en la misma superficie, pero otros eligen nuevas tierras dentro de su ejido para dejar descasar las que ya usaron.

La Milpa suele ser el susutento alimenticio para las familias rurales y combinan la actividad con la apicultura y comercio.

Los tiempos de preparación significa trabajar en el 'chapeo' o limpieza de la tierra y quienes tienen la posibilidad pagan jornales para hacerlo y quienes no, suelen trabajar poco a poco todos los días.

Desde hace casi 30 años, el gobierno de México supo de la necesidad de los productores de maíz, de los milperos por capital para los preparativos de la nueva siembra y bajo esa premisa y la de apoyarlos para enfrentar el Tratado de Libre Comercio, es que se creó el Procampo, un apoyo directo a los hombres y mujeres del campo, pero que llegaba después de las siembras, cuando los productores ya habían hecho el esfuerzo y el recurso terminaba usándose en otras actividades.

Esta administración, la cuarta transformación, se enfiló porque este apoyo se mantuviera bajo otro nombre: Producción para el Bienestar, con un apoyo de mil 600 pesos por hectárea para los preparativos dela siembra.

La entrega de los apoyos ha sido para antes de mayo, pero este año, que es electoral, el compromiso es que sea antes del 31 de marzo, y se ha hecho el avance en Campeche y Quintana Roo, en un promedio de 75 por ciento, pero en Yucatán hasta la semana pasada se llevaba un avance de 15 por ciento.

La falta de personal no había permitido hacer los trámites y solicitar los recursos.

Por décadas, a los productores de maíz se les ha dado un apoyo directo para sus siembras, que al llegar a destiempo, se usaba para otros fines.

Este año electoral dibuja la esperanza que los recursos lleguen justo en el momento en que se requiere la mano de obra y la renta de maquinaria para limpiar, para la roza y tumba de las tierras y estar listos para la siembra.

Las lluvias, el temporal y las semillas que los productores van almacenando, permitirán que se haga la siembra entre mayo y junio para lograr las primeras cosechas de elote tierno en octubre y noviembre, antes de Día de Muertos o Hanal Pixán.

Los preparativos comienzan y si el temporal es favorable, estaremos disfrutando del elote tierno, tortilla con maíz nuevo, atole y otras delicias derivadas del maíz.

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