Lo Básico

De salchichas y jamones

El consumo per cápita de carnes frías en México es de ocho kilos al año y de todas las que se elaboran, 52 por ciento es con producto de ave.

Los mexicanos somos buenos consumidores de carne, ocupamos el sexto lugar en el mundo en consumo per cápita, y también somos buenos productores de cerdo, res y pollo; también andamos en el sexto lugar a nivel internacional.

Entonces, ¿por qué para nuestras tortas y hot dogs la industria tiene que importar carne?

Es un tema de negocios.

En la industria cárnica, agrupada en el Consejo Mexicano de la Carne (Comecarne), lo ideal sería comprar sus insumos en pesos y de producción nacional, pero para los avicultores, los criadores de pollos y pavos, que es la principal carne que utilizan para la preparación de las carnes frías, no resulta negocio vender carne, sino pollos y pavos enteros, porque a los mexicanos nos gusta comprar pollos enteros o por piezas, además de que es menos inversión vender pollos enteros que pura carne.

Las últimas estadísticas de la Comecarne, presentadas hace unos días, revelan que México produce 3.8 millones de toneladas de carne de ave, y consumimos 36 kilos por personal al año de carne de pollo.

Esto quiere decir que nos gusta el pollo y es una de las proteínas animales de mayor acceso, porque es de las menos caras.

Y como a los avicultores les resulta más atractivo vender los pollos enteros, para que los comercializadores lo vendan enteros o en piezas, los industriales de la carne deben importar la carne de pollo y pavo para preparar los jamones y salchichas.

Resulta que el consumo per cápita de carnes frías en México es de ocho kilos al año y de todas las carnes frías que elaboran, 52 por ciento es con carne de ave; de ese total, 34 por ciento la destinan para hacer jamones y 60 por ciento salchichas.

Cambiar este modelo no es sencillo, y aunque se den las políticas públicas para lograrlo, el tema es que para los avicultores es más atractiva la venta de pollos enteros para la comercialización, que la inversión en la venta de la carne.

La principal fuente de importación para la industria es Estados Unidos, pero con la frontera abierta por el tema del Paquete Contra la Inflación y la Carestía, la frontera está abierta para comprar desde Brasil, una de las naciones competitivas en la materia.

Así que aunque los jamones y salchichas no estén en el plan y su precio no se vea reflejado en la canasta básica de la Profeco, la industria será de las beneficiadas ya que está abierta la importación para las carnes de ave, res y cerdo.

Y para cerrar, algunos números: ocupamos el sexto lugar en producción de carne por las 2.1 millones de toneladas en res, 3.8 millones en pollo y 1.4 millones en cerdo.

China es el líder con 14.7 millones en pollo y 48.8 millones en cerdo.

Somos el sexto país en consumo con nueve millones de toneladas con 1.9 millones en res, 4.7 millones en pollo y en 2.3 millones en cerdo.

El consumo por persona al año en res es 15 kilos, en cerdo 18 y en pollo 36.

En carnes frias ocho kilos y el insumo principal debe ser importado.

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