Miscelánea de Arte y Cultura

Mujeres indígenas en la ciencia

Recientemente, el CIESAS, el CONACYT y el IDRC de Canadá, organizaron el Primer Foro Anual de Posdoctorantes Indígenas STEM, en él participaron mujeres procedentes de pueblos originarios para entablar un diálogo sobre los retos de las mujeres indígenas en la ciencia.

A partir del Día Internacional de la Educación la semana pasada, una colega y yo recordábamos que en esta materia hace dos décadas las expectativas para las mujeres en el siglo XXI eran muy positivas, tan solo con los Objetivos de Desarrollo del Milenio (hoy Objetivos de Desarrollo Sostenible) casi 200 países se comprometieron a terminar con la desigualdad de género en educación y en todos los rubros. Hace 5 años se evaluaron los progresos, se amplió la lista y se planteó cumplirlos en el 2030, para ello una de las metas clave es asegurar el acceso igualitario a todos los niveles de enseñanza para las mujeres y personas vulnerables, entre ellos, los pueblos indígenas.

Recientemente, el CIESAS, el CONACYT y el IDRC de Canadá, organizaron el Primer Foro Anual de Posdoctorantes Indígenas STEM (siglas en inglés de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), en él participaron mujeres procedentes de pueblos originarios para entre otras cosas, entablar un diálogo sobre los retos de las mujeres indígenas en la ciencia. Una de las participantes, Lilian Chel Guerrero, me aclaró que apenas el .1% de la población en el país tiene nivel posgrado y que las indígenas son apenas el .0006%. A una década del 2030 estas cifras delatan una enorme desigualdad, sobre todo para las mujeres de origen étnico.

Lilian, maya originaria de Yucatán, es Doctora en Ciencia de los Alimentos y Biotecnología, trabaja en Maxcanú, población yucateca de poco más de 20 mil habitantes, 90 por ciento indígena; ahí se cultiva principalmente chile habanero, ella estudia el perúnculo, hojas y tallo para su posible aprovechamiento en alimentos fortificados y fármacos contra el cáncer. Dedicarse a la ciencia le implicó varios retos: elegir un camino diferente al de la mayoría de las mujeres de su comunidad, gastos y la discriminación por su apellido, forma de hablar, de vestir y por todo aquello que revela su origen, hoy reconoce que "de alguna forma uno va aprendiendo a sobrevivir sin dejar tu naturaleza indígena porque eso lo tenemos bien arraigado", su estrategia fue camuflarse hasta sentirse segura para luego hacer de ese origen una poderosa arma en su quehacer científico.

Este año Lilian dará a conocer los resultados y aplicaciones de su investigación, con los cuales beneficiará a Maxcanú; aparte sensibiliza a la población sobre la importancia de la ciencia con actividades como obras de teatro, talleres y diplomados que empoderan sobre todo a niñas y mujeres, con el fin de que emprendan sus propios negocios y/o alcancen la educación superior. Lilian es testimonio de los obstáculos que las mujeres indígenas enfrentan –y que se deben atender– para alcanzar una igualdad educativa, pero también lo es de los esfuerzos que desde sus propias comunidades emprenden para cerrar brechas: "amas lo que haces, amas tu comunidad, amas a tu etnia, entonces eso te motiva a querer que otros puedan tener la oportunidad que tú tienes".

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