Moneda en el Aire

Inteligencia artificial y regulación proporcional

Los reguladores empezarán a cambiar su mentalidad sobre la forma en cómo se realiza la regulación antilavado porque están más abiertos a métodos nuevos como el uso de la inteligencia artificial, el aprendizaje automático y la robótica.

Desde hace años la banca tanto de menor tamaño como aquellos que operan solo en ciertas áreas de negocio, como son los bancos de inversión, ha pedido y buscado tener una regulación diferenciada para disminuir sus costos de operación, sin que hasta ahora se tengan grandes avances a la vista.

Desde hace un año, el presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), Adalberto Palma, quien en su momento impulsaba este tema en el sector privado, analiza a detalle las ventajas y desventajas de tener una regulación proporcional —que es como le llaman a la discusión que iniciaron con el gremio financiero—, principalmente el bancario, y que tendría como eje central reducir la entrega de algunos reportes que son innecesarios para quienes por ejemplo, no realizan operaciones de captación por ser un banco de inversión.

Por ejemplo, Fico, compañía especializada en el uso de analítica predictiva y ciencia de datos para mejorar las decisiones operativas de las instituciones financieras, considera que la constante presión en los bancos para detener los siempre crecientes costos de cumplimiento en temas como la prevención de lavado de dinero, ha hecho que aumentaran el tamaño de su personal de cumplimiento en más de un 500 por ciento en los últimos años. Un banco mexicano de tamaño mediano, decía, tenía más de 200 personas solo para cumplir con todos los reportes que les piden las autoridades mexicanas en ese tema. En Estados Unidos, las compañías de servicios financieros actualmente gastan más de 31 mil 500 millones de dólares al año para asegurar el cumplimiento con las regulaciones de prevención de lavado de dinero.

Para Fico, en el futuro inmediato considera que los reguladores empezarán a cambiar su mentalidad sobre la forma en cómo se realiza esa tarea y estima que los entes normativos en el mundo están más abiertos a métodos nuevos como el uso de la inteligencia artificial (IA), el aprendizaje automático y la robótica. De hecho, asegura, están exhortando activamente a los bancos a considerar, evaluar y, de ser posible, implementar estas innovadoras tecnologías.

Para ello, la IA deberá en ese caso proporcionar una explicación adecuada sobre por qué se generó la alerta, ya que eso ayudaría a las investigaciones y podría confiar en esa tecnología.

Aunque pareciera lejano el uso de esta tecnología, lo cierto es que en México tanto autoridades como bancos avanzan en ese camino, y la idea de reducir la carga regulatoria y con ello los costos, es que al final se refleje en que no solo tengan mayores ganancias, sino en que logren traspasar esa eficiencia en menores costos en los servicios que cobran al usuario, y ayudarlos también a continuar la expansión de los servicios financieros en el país.

Si bien, las percepciones sobre los avances en tener una regulación proporcional son muy distintas dependiendo a qué banco se le pregunte, lo cierto es que si se logra combinar que reduzcan sus costos como lo han pedido y que se traduzca en beneficio no solo para sus accionistas, sino para sus clientes, sería un avance en el que todos se beneficiarían, pero hoy el tema sigue discutiéndose. Por lo pronto, la moneda está en el aire.

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